Vocero de gobierno reconoce error al justificar formateo de computador de Dávalos
"Creo que ese fue un error de mi parte, vuelvo a señalar generó una situación inconfortable para mí y para el gobierno, y lo lamento”, precisó Marcelo Díaz.
El vocero Marcelo Díaz se equivocó. Así de simple. El ministro Secretario General de gobierno, quien tiene por función ser la voz del Ejecutivo ante los distintos hechos que ocurren en el país, reconoció haberse equivocado cuando justificó el formateo del computador de Sebastián Dávalos, ex director sociocultural de la Presidencia e hijo de la Presidenta Bachelet, en el contexto de su renuncia causada por el caso Caval.
La investigación, que lleva adelante la fiscalía de O’Higgins, indaga la eventual comisión de delitos en un negocio inmobiliario en la zona de Machalí, VI región, por parte de la empresa de Natalia Compagnon, nuera de la mandataria. En ese sentido surgió una intrincada trama de eventuales irregularidades, donde se están investigando tanto a los operadores de la venta del terreno, como al hijo de la mandataria.
Las declaraciones de este último giraban en torno a que éste habría realizado trabajos privados para Gonzalo Vial Concha, empresario agrario, mientras se desempeñaba en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Existe actualmente una querella en contra de Dávalos por los posibles ilícitos cometidos mientras ostentaba ese cargo.
Ahora se sumaría una nueva acción penal, que busca esclarecer si se cometió delito en el proceso de formateo del computador de Dávalos en La Moneda, después de que el jefe informático de la sede del Ejecutivo, Luis Escalona, declarara que fue el propio hijo de la Presidenta quien solicitó expresamente el formateo de su equipo.
En ese sentido, el vocero de gobierno salió a referirse a trascendidos referidos al formateo del computador de un funcionario público, el hijo de la Presidenta, realizado poco después de que éste renunciara a causa de la crisis generada por el Caso Caval.
El 24 de agosto Díaz habló de un protocolo que establecía que todos los computadores se formateaban para después dejarlos limpios para que fuesen utilizados por un nuevo funcionario de gobierno. Dicho protocolo fue desmentido en primera instancia por la Fundación Jaime Guzmán, quienes indicaron que el decreto supremo que rige estas actividades establece que la información debe mantenerse por un tiempo. Eso, sumado a la declaración de Luis Escalona, terminaron por dejar en una posición muy complicada al vocero de gobierno, el que recién salió a hablar hoy cerca de las 15 horas.
El ministro reconoció que fue su responsabilidad las declaraciones efectuadas. “Con mucha franqueza decir que recibí información incompleta, que fue la que les proporcioné a ustedes. Lamento que eso haya ocurrido porque ha generado una situación inconfortable para mí en lo personal y para el gobierno. Y por cierto a partir de este episodio vamos a tomar todas las medidas para que aquello no vuelva a ocurrir”, indicó Díaz.
Se le consultó nuevamente respecto del computador de Sebastián Dávalos y ahora sí que el ministro fue cauto: “Lo desconozco absolutamente (…) no voy a volver a cometer el error de hablar de materias respecto a las cuales no tengo suficiente información. Creo que ese fue un error de mi parte, vuelvo a señalar generó una situación inconfortable para mí y para el gobierno, y lo lamento”.
