Suena familiar: Dávalos declaró que se enteró “por la prensa” de los negocios de su esposa en caso Caval

El último gran golpe del caso Caval, investigación que busca esclarecer si existió delito en la compra-venta de un terreno en Machalí por parte de la empresa de Natalia Compagnon, nuera de Michelle Bachelet, tuvo por objeto al hijo de ésta, Sebastián Dávalos.

Cuando aún el fiscal Luis Toledo, en carrera para la Fiscalía Nacional, dirigía la investigación, trascendió un informe de Carabineros que establecía que se formateó el computador de Dávalos, ex director sociocultural de La Moneda, justo cuando renunció a causa del impacto del caso. Luego se supo, por parte del jefe de informática de Palacio, Luis Escalona, que fue el mismo Dávalos quien solicitó el borrado de la información de su equipo.

En su segunda comparecencia ante el ente persecutor, el hijo de la mandataria, según publicó hoy El Líbero, aseguró que nunca supo de los negocios de su esposa. “Muchos de ellos me he enterado por lo publicado en prensa durante este año 2015, por ejemplo los negocios que lideró Valero (Mauricio, copropietario de Caval) con Saydex o la decisión de adquirir los predios en Machalí”.

En ese sentido también declaró que no sabe “cuál fue la ganancia efectiva para Caval y para mi cónyuge. Yo no administro su patrimonio. Ella es muy reservada en sus relaciones comerciales y en sus propios negocios y yo no le pregunto y tampoco me interesa”.

Asimismo, indicó que no tuvo participación en el negocio de los terrenos de Machalí. Además, declaró que estas informaciones han sido tratadas con el único fin de “denostar mi honra e involucrar políticamente a la Presidenta de la República. Lamento profundamente que se insista en ese tipo de argumentaciones que carecen de todo fundamento”.

Profundizando sobre su participación en Caval, indicó que lo único que hizo fue “haber asistido a una reunión con Andrónico Luksic, a quien no conocía personalmente”.

Otro tema de importancia era en los trabajos que realizó Dávalos para la empresa de su esposa mientras se desempeñaba en la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon). Esto, porque los antecedentes del caso afirman que prestó asesorías paralelas, pagadas, para el empresario Gonzalo Vial Concha. “Si bien colaboré en esos proyectos ambos dueron desechados por el cliente, no se verificaron en definitiva y por cada uno de ellos emití la respectiva boleta de honorarios a la empresa Caval”, declaró.

Respecto de la legalidad de esta función dual, el hijo de la mandataria declaró que “en ninguno de esos trabajos yo tenía impedimento legal ni reglamentario para realizarlos conforme al artículo 68 de la Ley de Probidad, la que me permitía ejercer labores anexas a la función pública que desarrollaba en la medida en que no ocupe recursos públicos, no se refieran a las propias labores del servicio en que me desempeñaba”.