Universidades acusan “incertidumbre” y “ambigüedad” por falta de detalles en gratuidad en Presupuesto

¿Acaso alguien se sorprendió con la presentación que realizó anoche la Presidenta Michelle Bachelet de lo que será la Ley de Presupuestos 2016? Lo más probable que quienes sí quedaron con una mezcla de sorpresa, suspenso y decepción son quienes esperaban que este miércoles se aclarara -al fin- el mecanismo con el cual el 50% de los estudiantes más vulnerables resultarán beneficiados por una de las promesas de campaña más sonoras, la gratuidad en la educación superior, medida que de a poco se ha transformado en un zapato chino para la actual administración.

No obstante, esto no ocurrió ayer.

La Mandataria, en cerca de 10 minutos, detalló algunos puntos respecto de cómo se gastará el dinero que se contempla para el 2016. El escenario lo adelantó complejo a causa del bajo precio del cobre -producto vital para la economía chilena- sumado al complejo contexto internacional. Responsabilidad fiscal es el sello principal de este presupuesto, lo que se equipara al “realismo” que anunció la mandataria poco después de mediados de este año, y va en la línea que planteaba el ministro de Hacienda Rodrigo Valdés. Pero el “sin renuncia” se manifestó en que en su alocución, Bachelet dijo que “avanzaremos en nuestros compromisos y superaremos la adversidad”.

Son 321 mil 426 millones de pesos los que se utilizarán para superar los grandes desastres naturales que han afectado a Chile, donde se consideran desde el terremoto del 27/F, los que afectaron al norte tanto el 2014 como el 16 de septiembre pasado, el incendio en Valparaíso, los aluviones del norte y la erupción del volcán Calbuco.

Además, poco después de que terminara la interpelación a la ministra de Salud, Carmen Castillo, donde se tomaron temas como la tremenda deuda hospitalaria (246 mil millones de pesos), la construcción de 27 hospitales y su puesta en duda, así como también las listas de espera, la mandataria adelantó que se busca formar cerca de mil médicos y destinar 390 a la atención primaria -consultorios municipales.

Además, haciéndose cargo de una agenda que se ha amplificado a causa de la cobertura de los portonazos, los que han generado una sensación importante de inseguridad, la Presidenta anunció un aumento de 6 mil carabineros y mil 200 policías.

“Uno de cada cuatro pesos estará destinado a Educación”

No se exagera al afirmar que era lo que gran parte del país esperaba. Desde el 21 de mayo la incertidumbre y la poco claridad eran los conceptos que más repetían tanto los rectores como los estudiantes, en relación a la gratuidad en la educación superior. Ayer se aclaró, de boca de la Presidenta, ante el país, que finalmente serán 200 mil estudiantes los beneficiados, lo que se alza por el 50% de los alumnos más vulnerables. Asimismo, trascendió, de acuerdo a El Mercurio, que se destinarían cerca de 500 millones de dólares para este ítem, pero finalmente trascendió que se tienen considerados finalmente 330 millones, pese a que el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, lo negó.

La mandataria dejó pistas en el párrafo donde podría haberse referido al mecanismo bajo el cual se entregarían estos recursos, aún en duda pese a que se ha adelantado que sería una suerte de solución intermedia, con algo de beca -que implica compromiso con el alumno- y algo de aporte a las universidades.

Ayer no lo dijo. Es más: se llegó a la conclusión, de acuerdo a un documento sobre el Presupuesto que detalla La Tercera, que lo importante es cómo llegar al compromiso de la gratuidad, pero precisa que “el debate sobre los instrumentos para alcanzar este objetivo en el marco del Presupuesto 2016 es secundario”. El rector de la Univesidad Católica del Maule, Diego Durán, indicó que “persiste la incertidumbre sobre los mecanismos para el beneficio y somos muchos los que esperamos claridad al respecto”. Luego, Durán realizó una apreciación: “no hubo novedad en el discurso, sólo reiteró con fuerza lo que ella (la Presidenta) espera”.

Las universidades, al deber esperar que se apruebe la glosa -ítem dentro del presupuesto que especifica cuánto se va a gastar y para qué- han estado en la obligación de postergar una serie de conceptos necesarios para su funcionamiento, como las vacantes y cupos para las carreras para el próximo año. Es más: tendrán tan sólo 10 días para determinar si se suman o no a la gratuidad en este caso, cuando termine de discutirse el presupuesto.

Esta espera -para saber cómo se vendrá el presupuesto y el mecanismo de entrega de recursos a las universidades- se prolongará al menos formalmente hasta el lunes, cuando el Consejo de Rectores (CRUCh) se reúna en sesión especial, a la que está invitado el jefe de la División de Educación Superior del Mineduc, Francisco Martínez.

Diversos parlamentarios han intentado aseverar la conclusión de la “creativa” solución del gobierno para llegar a la gratuidad. El diputado Marcelo Schilling (PS) declaró a El Mercurio que este dinero se entregaría vía aporte a las universidades, el que se administraría por alumno. Esto tiene riesgos, según advertía el diputado Jaime Bellolio (UDI), ya que si queda mal redactado, podría negarse al acusarse de inconstitucional. Pero esta mañana el senador DC, Andrés Zaldívar, precisó a CNN Chile que “se mantiene el sistema de becas”, desechado por la mandataria el pasado 21 de mayo. O sea… no hay claridad aún.

La incertidumbre y malestar se mantiene en los actores que han estado más activos en esta discusión, y en esta mañana la Presidenta se encuentra en un consejo de gabinete para detallar aspectos del presupuesto a sus ministros. El suspenso continúa y el tiempo sigue avanzando.