Registro Civil retrasa apertura de sus oficinas por tercer día consecutivo en protesta por descuentos salariales
La mañana de este miércoles los trabajadores acusaron la presencia de Fuerzas Especiales de Carabineros, con una supuesta orden de desalojo. Finalmente descartaron esta posibilidad, pero se trenzaron a golpes con la prensa mientras a empujones sacaron a los periodistas de la sede Huérfanos.
Ante la vista y paciencia de los ciudadanos que estaban esperando ser atendidos en el Registro Civil, repentinamente los trabajadores del servicio empezaron -a empujones- a sacar a los periodistas y camarógrafos que estaban al interior de la sede Huérfanos cubriendo un posible desalojo que acusaban los dirigentes.
Temprano esta mañana, la presidenta de los trabajadores, Nelly Díaz, alertaba de la presencia de Carabineros en las cercanías de esta oficina. “Tenemos orden de desalojo, y si se desaloja, ¿Cómo vamos a atender?”, precisaba la dirigente.
Ella acusaba que la acción de la Fuerza Policial tenía que ver con una supuesta orden del director nacional, Luis Acevedo, para asegurarse de que las oficinas del servicio empezaran a atender a las 8 y media, como regularmente está normado, y no con retrasos, como ha ocurrido durante dos días seguidos. Esta tipo de protesta se generó por la poca claridad, según los funcionarios, en la forma cómo se recortarán los sueldos de los trabajadores que participaron en los 39 días de paralización.
Sin embargo, pasadas las 8:30, no hubo desalojo por parte de Carabineros, y los trabajadores comenzaron, empujones mediante, a sacar a los periodistas que estaban cubriendo este nuevo episodio de tensión entre los trabajadores y el gobierno.
Los últimos acontecimientos de esta pugna, tras el fin del paro del servicio, tienen que ver con la falta de claridad -según acusan los trabajadores- respecto de los descuentos que sufrirán los trabajadores. Primero Nelly Díaz recibió una nómina que contenía el total de los trabajadores (sin detalles) que sufrirían los descuentos salariales por participar en el paro, y la cantidad de horas.
Luego, recibieron el detalle: jubilados y trabajadores con licencia estaban considerados entre quienes sufrirían los recortes, y la misma Díaz, por ser dirigente sindical, no estaba considerada. La presidenta de los funcionarios acusó que esto respondería a un intento del gobierno para dividirlos, y finalmente determinaron donar parte de su sueldo a los afectados.
Esto, en tanto que la gente continuaba amontonándose en largas filas en las afueras de las oficinas del Registro Civil, recordando las esperas de cerca de 10 horas que debían enfrentar en pleno paro del servicio. Finalmente a las 9 de la mañana con 10 minutos se abrieron las puertas del servicio.