El drama de una familia osornina que no puede dar sepultura a pariente con obesidad mórbida
María Coronado pesaba 300 kilos al momento de morir. Su familia ha recorrido todo Osorno en busca de una funeraria que la ayude con los elevados costos que una urna y un funeral especial significan.
La familia de María Coronado Cárdenas- que murió la semana pasada a los 43 años como consecuencia de un paro cardio-respiratorio y una falla multiorgánica, afecciones causadas por sufrir de obesidad mórbida- ha debido lidiar, además de con el duelo por la pérdida de un ser querido, con una dolorosa procesión.
Recorrieron una por una todas las funerarias de la comuna de Osorno. En ninguna lograban costear el elevado precio de un ataúd especial donde puedan enterrar a María, que cuesta 1 millón 200 mil pesos. María pesaba 300 kilos.
Finalmente, la aproblemada familia llegó a la Funeraria San Francisco, propiedad de Jorge Zincker. El hombre, al escuchar el drama- que incluía un traumático traslado del cuerpo de María al SML- no lo pensó dos veces.
Entendió que era un tema social. Mandó a hacer una urna especial y está liderando junto a la familia de la mujer una campaña para que la Municipalidad de Osorno los ayude a reunir el dinero necesario para costear el retrasado funeral que necesitan realizar en el cementerio de Rahue Alto.
“Si no logramos reunir el dinero con la municipalidad, tendremos que asumir parte del costo nosotros también. Porque esto es un tema social”, reiteró Zincker al portal Soy Osorno.