VIDEO | “El Manjar” se salvó de la mortal balacera en discoteque de San Antonio

Era una noche más de fiesta en la discoteca sanantonina llamada, como si de un mal augurio se tratase, “9 Milimetros”. La única tensión que se vivía era una larga espera para que Víctor Zúñiga, más conocido como “El Manjar”, saliera a escena a hacer su show.

De la espera y la expectación, de un momento a otro se pasó a la desesperación y los gritos. Pero no porque “El Manjar” estuviera haciendo delirar a su fanaticada. Nada que ver. Zuñiga ni siquiera alcanzó a salir a escena. Según relataron a través de su Facebook los administradores de la disco, a eso de las 3 de la mañana Maikol Letelier sostuvo una diferencia de opinión con otro parroquiano que terminó con Maikol, de 26 años, amenazando de muerte a la otra persona. Producto de eso, los guardias de “9 milimetros” lo invitaron a retirarse del local.

Pero Maikol tomó la decisión de regresar a cumplir con su amenaza. Fue la última decisión que tomó.

Tal y como se aprecia en el video de abajo, Maikol llega al local armado con dos pistolas. De una patada abre la puerta. Entra. Apenas lo hace, según contaron testigos al diario Lider de San Antonio, el joven es interceptado por uno de los guardias que lo había echado hace unos minutos. Antes, eso sí, había amenazado y disparado contra el cajero de “9 milimetros”. Por suerte falló. Durante el forcejeo con el guardia, sostienen de la discoteca, se percutaron tres disparos. Uno de ellos se alojó en el pecho de Maikol. La pelea continuó afuera del local.

Como se aprecia en el video, los dos hombres caen al suelo. Ahí sale otro disparo. Impacta al guardia identificado con la iniciales F.C.G. en uno de sus muslos. Luego Maikol huye del local, pero herido de muerte. F.C.G. disparará al menos en una ocasión por la espalda a Maikol. Algunos metros más allá, caerá sin vida. Ayer fue despedido por amigos y familiares que lo velaron en la sede del club deportivo Cerro Alegre. Después fue enterrado en el cementerio parroquial de San Antonio. Tanto en la sede del club deportivo, como en el camino al camposanto, y en el mismo cementerio, se sintieron varios balazos al aire.

F.C.G. fue formalizado por su participación en la muerte de Letelier, pero quedó en libertad por mientras se investigan los hechos. Según constató el Lider de San Antonio, durante la audiencia de formalización, las madres de los protagonistas de esta trágica historia se encontraron. La madre del guardia lloraba desconsolada. Fue la madre del joven fallecido quien la consoló. “No llore más. Nosotros no le vamos a hacer nada ni a usted ni a su familia. Somos gente creyente”, le habría dicho.

Cuando el juez decretó arresto domiciliario nocturno a F.C.G., la madre de Maikol perdió el control. Golpeó el vidrio que la separaba del imputado y gritó que se merecía al menos una disculpa.