Cero espíritu navideño: lo mató a golpes con muleta ortopédica por colarse a un asado en Quillota

Avenida Vicuña Mackena esquina Herboso. Amplio sitio eriazo en la comuna de Quillota. Quinta región. Noche. Un grupo indeterminado de personas sin casa celebra un regado asado de fin de año. Al lugar llegar Merardo Isaac Campos Riadi, de 45 años. Cree que su presencia pasará inadvertida.

Pero no. Al menos no para K.W.G.A., de 27 años. Cuando ve a Merardo tomando y comiendo carne en situación de paracaidista, se le va encima. Primero lo ataca a verbalmente. Lo insulta. Campos todavía masticaba un pedazo de carne cuando le llegó el primer golpe. El hombre de 27 años se le fue encima con un ladrillo. El resto de los asistentes mira la escena con incredulidad. Pero nadie hace nada.

Después de darle ladrillazos. K.W.G.A. toma una muleta ortopédica y lo golpea con eso. Se vuelve loco pegándole. Le pega hasta que Campos no reacciona. Lo mata. K.W.G.A. junto al grupo huye del lugar. O se quedan ahí, hasta terminar el asado. Esa parte no está clara.

Lo que está claro es que al otro dia junto a las cenizas del asado lo único que quedaba en el sitio abandonado era el cuerpo de Merardo Campos, con el cráneo desfigurado. Dos personas llegan hasta ahí en la mañana y se topan con la macabra imagen. Llaman a la PDI. Entonces la Brigada de Homicidios llega al lugar y está claro que se trató de un homicidio. Campos además era un indigente conocido de la zona. Así lo explicó al diario El Observador el comisario de la BH Orlando Calderón Molina.

Un par de averiguaciones por ahí, otras por allá, consultando a quienes pudieron haber asistido al evento al aire libre de la noche anterior, los detectives llegaron a la identidad de K.W.G.A. pero no él estaba lejos. Esa mañana temprano había, junto a su novia, tomado un bus hacia Copiapo. Fue allá donde lo detuvo la PDI  y allá pasó a control de detención, pero se espera que sea formalizado y enjuiciado en Quillota.