Contraloría cuestiona vacuna que se suministró a más de 400 mil niñas
El efecto que debía tener este fármaco era prevenir enfermedades derivadas del Virus del Papiloma humano.
La vacuna “Gardasil”, utilizada por el Ministerio de Salud en un proceso de vacunación masiva de 400 mil niñas entre 9 y 13 años, en el marco del Programa Nacional de Inmunizaciones de 2014, enfrenta cuestionamientos por parte de un dictamen de la Contraloría General de la República.
De acuerdo a lo que informa El Mercurio, los cuestionamientos apuntan al ingreso de este fármaco. La vacuna corresponde al laboratorio Merck Sharp & Done, y se utiliza como método de prevención de enfermedades provocadas por el Virus del Papiloma Humano (VPH), que origina la mayoría de los casos de cáncer cérvicouterino, que corresponde a la séptima causa de muerte entre las mujeres en Chile.
El dictamen del ente administrativo plantea que en el proceso de registro sanitario del producto –trámite que permite su utilización en el país- el Instituto de Salud Público (ISP) consideró tres estudios científicos para tomar la decisión de incorporarla en el mencionado plan de inmunización.
Pese a esto, la Contraloría indica que “de la simple lectura de dichos documentos, y sin entrar en su ponderación científica, se aprecia que tales estudios no son concluyentes ni justifican la decisión del registro de la vacuna Gardasil en las dosis planteadas”.
La solicitud de este registro era para un esquema de vacunación de dos dosis que se aplica desde 2014, con un año de diferencia entre cada inoculación, a pesar de que el fármaco tenía autorización para un esquema de tres dosis con un máximo de seis meses entre uno y otro.
Quien denunció esta situación fue la diputada Karla Rubilar, y ella indicó que “el uso de un esquema posológico que no tiene sustento científico es la demostración del desmantelamiento del Programa Nacional de Inmunizaciones por parte del actual Ministerio de Salud, que antes era motivo de orgullo del país”.
En tanto, el jefe del programa Nacional de Inmunizaciones, Fernando Muñoz, respondió que “lo peor que podría pasar es que el registro tuviera que volver a recibir antecedentes, y con los nuevos (antecedentes) sólo se reafirma la postura del Ministerio”.
Por su parte, el laboratorio Merck Sharp & Done sostuvo que la vacuna es segura para quien la recibe y que en otros países se aplica de acuerdo al mismo esquema utilizado en Chile y que el dictamen de la Contraloría.