Camila Vallejo: "Si yo hubiera estado en el lugar de la Presidenta, le acepto la renuncia a Burgos"
La diputada criticó duramente la gestión del ministro del Interior y señaló que lo ocurrido con Bachelet debió "conversarse internamente".
La diputada Camila Vallejo no tuvo pelos en la lengua para referirse al impasse entre Jorge Burgos y la Michelle Bachelet hace más de una semana, luego de que la Mandataria sorprendiera a todos al viajar a La Araucanía, incluyendo al propio ministro del Interior, quien incluso habría presentado su renuncia, la que no fue aceptada por la Presidenta.
Respecto a esta situación, la parlamentaria del Partido Comunista, señaló en entrevista a El Mercurio que “si hubiera estado en el lugar de la Presidenta, sí habría aceptado la renuncia del ministro Burgos. O, rechazada la renuncia, después yo misma lo habría despedido“.
“Cuando son ministros de confianza, del equipo más cercano de la Presidencia, lo que corresponde cuando se enfrentan a situaciones complicadas es conversarlo y resolverlo internamente y no hacer una exposición al nivel mediático que se alcanzó, desde mi punto de vista, muy intencionadamente”, argumentó la ex dirigenta estudiantil.
En cuanto a si fue o no legítimo el reclamo de Burgos por no haber sido notificado sobre el viaje a La Araucanía, la diputada es enfática en señalar que sí “pero no con tanto escándalo”.
Consultada por la gestión del secretario de Estado, Camila dice que “no tengo una muy buena evaluación del Ministerio del Interior, tanto por lo que sucedió con los camioneros, como por el manejo de los distintos conflictos con los trabajadores. Hablo de cómo se gestionó el conflicto con los trabajadores subcontratistas del cobre, que, no por una responsabilidad directa del ministro del Interior, pero terminó con una muerte de un trabajador. Con cómo se manejó el paro del Registro Civil, la movilización de los trabajadores de la Dirección General de Aeronáutica. Más allá de compartir o no las demandas de los trabajadores, creo que fue una gestión más característica de un gobierno de derecha que de un gobierno que busca por sobre todas las cosas el diálogo. Diría que en el Ministerio del Interior más bien se apostó a legitimar por la vía de los hechos el reemplazo en huelga, uno de los temas que más cortapisa se ha puesto en la discusión laboral”.