Claudia Umpiérrez, la árbitro que estará en Primera: "Hay machismo, pero estamos ganando espacio"
Comenzó su carrera en 2003 y durante este 2016 debutará en el fútbol de honor de la competitiva liga de Uruguay.
Claudia Umpiérrez, la primera árbitro en la elite del fútbol uruguayo, considera una “gran responsabilidad” moverse en un mundillo en el que las mujeres van “ganando espacio” a pesar de que todavía “hay machismo“.
Vinculada al arbitraje desde 2003, año en el que comenzó a formarse como colegiada, e internacional desde 2010, esta abogada de 33 años fue situada el pasado 7 de enero en el décimo lugar de las mejores árbitros del mundo en 2015 para la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol.
“Estoy muy feliz de haber podido lograr este objetivo. Estoy cumpliendo un sueño a nivel personal y a nivel profesional, pero también tengo una gran responsabilidad por ser la primera para poder demostrar que no es una casualidad, sino que es fruto del trabajo“, dijo Umpiérrez en entrevista con Efe.
Dijo que su referente es la brasileña Silvia Regina de Oliveira, la primera árbitra del fútbol brasileño y la primera latinoamericana que dirigió un partido de un campeonato internacional masculino de la Conmebol, en la Copa Sudamericana en 2003.
De Oliveira se retiró en 2007 a los 42 años.
En un mundillo tradicionalmente dominado por los hombres, Umpiérrez considera que todavía “hay machismo”, pero también cree que las mujeres han ido “ganando espacio”, a pesar de que en ocasiones sean ellas mismas las que peor se portan en las canchas.
Dijo que en las canchas, sobre todo en las categorías inferiores, cuando las mujeres quieren atacar a las árbitras lo hacen con insultos como “gorda” o “fea”, algo que considera peor que lo que suelen hacer los hombres, que se centran más en aspectos “técnicos”.
“Hay machismo. Creo que hoy por hoy es menos. Hemos ido ganando espacio, no solo en el fútbol. Eso está bueno porque es una forma de generar que otras chicas se animen y que se pueda aumentar el número de árbitras acá en Uruguay”, opinó.
“Creo que de a poco vamos ganando espacio, van aceptándolo los hombres en la cancha, los jugadores y los dirigentes”, añadió Umpiérrez, y a manera de ejemplo resaltó para su ascenso las valoraciones se hicieron “en igualdad de condiciones con los hombres”.
En cuanto a su modo de dirigir los partidos, la uruguaya se define como “técnica y estricta” y asegura que lo único que espera tanto de técnicos como de jugadores es “respeto mutuo”.
Tras haber sumado experiencia con participaciones en el Mundial Sub’17 femenino de 2012 en Azerbaiyán, varios torneos sudamericanos y en el Mundial femenino absoluto de 2015 en Canadá, tiene claro su objetivo: ser seleccionada para dirigir en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
A su juicio está bien que en los torneos FIFA solo los hombres dirijan en el fútbol masculino y las mujeres en el femenino. Para Umpiérrez, hay que ir “paso a paso”.
“Obviamente el nivel de exigencia física a nivel masculino es superior, incluso las pruebas físicas que nosotras rendimos en tiempo son diferentes y obviamente para poder estar al nivel del fútbol masculino internacional también hay que tener otra preparación”, explicó.
“Me parece que hay que ir paso a paso y, quizás, como acá ahora tuve la oportunidad de estar en Primera División, quizás en un par de años se puede dar que no solo yo, sino otras chicas, estemos participando a nivel internacional también en el fútbol masculino”, agregó.
Claudia Umpiérrez, que trabaja como administrativa en un banco de Montevideo y como abogada independiente, es madre de una niña de dos años. Asegura que en su país no se puede vivir solamente del arbitraje, por lo que no se plantea dejar esos empleos, a pesar de ser la décima mejor árbitro del mundo en 2015.