Victorias de Viña del Mar, el controvertido tour reñido con el maltrato animal
La alcaldesa Virgina Reginato presentó una querella, contra todo aquel que resulte responsable, por maltrato animal a los caballos que tiran los tradicionales carros.
La imagen de un caballo blanco postrado en el suelo, en plena calle de Viña del Mar, fue ampliamente viralizada por las redes sociales en noviembre pasado. La foto evidenció el maltrato que sufren algunos caballos que tiran de los carros Victorias de la Ciudad Jardín, una suerte de turismo que se ha vuelto toda una tradición y que intentan emular carruajes de la antigua realeza europea.
“Nos preocupa mucho y lo que ha pasado últimamente no tiene justificación. Reforzaremos nuestra normativa y tomaremos las medidas para que no ocurra en nuestros coches victoria”. Esas fueron las palabras de la alcaldesa Virginia Reginato, una vez presentada una querella en tribunales contra todo aquel que resulte responsable por maltrato animal a dichos caballos.
Reginato agregó que ya se habían tomado algunas medidas al respecto desde el municipio. Una de ellas: el retiro de algunos coches que no cumplían con la revisión técnica y con caballos que no estaban en óptimas condiciones. Lo anterior, porque, de hecho, la regulación de todo el accionar de las victorias responde a una ordenanza municipal.
La crítica
La deplorable situación de los caballos ya había sido denunciada por animalistas de la ciudad meses antes. Pero no fue hasta un reportaje que hizo Mega cuando cobró notoriedad.
Al respecto, Patricia Cocas, fundadora de Pro Animal, aseguró a El Dínamo que detrás de todo esto “hay un tema cultural de la gente, de entender que los animales no deben ser usados para la entretención, porque ellos -los caballos- no son usados como medio de transporte o de trabajo físico. Están ahí para el turismo y entretención de las personas”.
La activista aseguró que este tipo de prácticas debiesen estar prohibidas, pero que ahora quedará en manos de la justicia. De todas formas, dice que aunque presentar la querella es un avance, “es un poco incongruente, porque son ellos mismos -la municipalidad- los que regulan todo el accionar de las victorias. Entonces deberían empezar a ahí antes que presentar una querella, que puede ser más parafernalia en este caso”.