Lagos Weber planteó establecer referéndum revocatorio al asumir como presidente del Senado
Así, la ciudadanía podrá derogar una ley aprobada por el Parlamento, junto con la chance de llamar a elecciones anticipadas y que el Presidente de la República tenga la facultad de disolver el Congreso.
Ricardo Lagos Weber asumió este martes la presidencia del Senado y su discurso estuvo marcado por la entrega de mayores atribuciones a la ciudadanía de cara a la crisis que enfrenta la clase política.
El parlamentario PPD sostuvo que “pocas veces nos hemos visto enfrentados a una crisis de legitimidad y confianza tan profunda como la actual, que no solo ha afectado a esta corporación sino que también a otras instituciones de nuestra nación”.
Junto con recalcar que esta carencia de legimitidad afecta a sectores como el empresariado, la Iglesia Católica, las Fuerzas Armadas y el Gobierno, Lagos Weber apuntó que los proyectos de la agenda de probidad “son un saludable primer paso, pero hay que profundizar más”.
Sin embargo, fue más allá y abogó por el establecimiento de referéndum revocatorios para leyes y cargos de elección popular.
“Creo en un ciudadano a quien se le entreguen herramientas para hacer escuchar sus opiniones. Una de esas herramientas es el establecimiento de referéndum revocatorios tanto para leyes como para cargos de elección popular”, declaró.
Así, la ciudadanía podrá derogar una ley aprobada por el Parlamento, junto con la chance de llamar a elecciones anticipadas y que el Presidente de la República tenga la facultad de disolver el Congreso.
“Medidas como estas permitirán no sólo más y mejor democracia, sino que inhibirán ciertas conductas. Porque una cosa es perder el escaño por vulnerar la ley electoral y otra cosa, muy distinta, es perder el mismo escaño porque la ciudadanía perdió la confianza en la persona o en la institución en su conjunto”, sostuvo.
Lagos Weber recordó que “otras naciones cuentan con este tipo de mecanismos y no se destruyen los órdenes jurídicos e institucionales, ni colapsan las democracias. Por el contrario, generan una sociedad más participativa y comprometida con lo que se promete y se legisla”.