Niños asesinados en dictadura: lo que el diputado García pasó por alto en su discurso anti aborto

La apasionada discusión que tuvo lugar en la Sala de la Cámara de Diputados en el marco de la votación de la ley de aborto dejó como saldo una sarta de frases que fueron ampliamente difundidas –y por cierto cuestionadas y criticadas- a través de las redes sociales.

Los que siguieron con atención la discusión extraían diversos argumentos, esgrimidos de forma apasionada pero sin mucho balance previo, particularmente de quienes se oponían a la iniciativa del gobierno, que se debiera votar en las próximas horas.

Una de las tantas que destacó es la del diputado de Renovación Nacional, René Manuel García, el que declaró que “lo que más me ha llamado la atención es que acá se ha comparado la violación a los Derechos Humanos cometidos en el gobierno militar con lo que están cometiendo aquí. Podríamos ser más crueles todavía. Podríamos decir que el Gobierno Militar o dictadura, como quieran llamarlo, mataba a las personas grandes. Ustedes las matan antes de nacer. ¿Cuál es la diferencia entre esos dos crímenes?”.

El parlamentario aparentemente intentó hacer un símil entre la Dictadura donde se “mataba a las personas grandes”, y el actual gobierno de la Nueva Mayoría, donde con este proyecto se busca matar a los niños “antes de nacer”. Si fuese así de excluyente, la declaración del parlamentario presenta lamentables omisiones.

En una nota publicada por el sitio de Radio Universidad de Chile, titulada “Menores desaparecidos: ‘La dictadura no tuvo límites a la hora de los crímenes’”, se mencionan una serie de víctimas del régimen asesino de Augusto Pinochet, que eran adolescentes o derechamente niños a la hora de sufrir los embates de la represión de esos años.

Aparte de la muerte de Rodrigo Anfruns, cuyo cuerpo apareció a pocos metros del lugar de su desaparición en junio de 1979, también se suma el caso de Carlos Fariña Oyarce, de 13 años al momento de su detención en La Pincoya, el 13 de octubre de 1973, cuyos restos fueron recién encontrados en el año 2000. Su hermano, Iván Fariña, indicó en ese momento a Televisión Nacional que “el saber que lo encontré, por un lado me da alegría, y me da mucha pena y mucha rabia saber cómo lo encontré, saber que tenía muchos impactos de bala”.

Otro caso es el de Jim Christie Bossy, que en Coquimbo, esperando la nochebuena de 1973, habría sido secuestrado y posteriormente ejecutado por una patrulla del regimiento “Arica”, junto a su amigo, Rodrigo Palma Moraga. Christie Bossy tenía 7 años.

Alicia Aguilar Carvajal tenía seis años cuando el 8 de septiembre de 1973, en la plaza Panamá, en Santiago, recibió un impacto de bala en el tórax  que la atravesó.

A pocas cuadras del estadio Víctor Jara, en el mismo año pero el 24 de septiembre, Samuel Castro (13 años)  fue herido a bala por un militar que custodiaba ese lugar.

Los casos mencionados, que reflejan la crueldad del régimen represor, no son los únicos.