El largo historial de conflictos que enfrentó Burgos en sus 13 meses en Interior

Durante la mañana de este miércoles se dio a conocer la renuncia del ministro del Interior, Jorge Burgos, al cargo que ocupó durante un año, tras reemplazar a Rodrigo Peñailillo.

Esto ocurrió luego de que el secretario de Estado sostuviera una reunión con la Presidenta Michelle Bachelet por cerca de 50 minutos y fue informada a través de un comunicado, siendo finalmente a las 13 horas su anuncio oficial.

Durante su estadía como el hombre fuerte dentro del Gabinete, Jorge Burgos debió enfrentar distintas situaciones que lo vieron enfrentados tanto con la Presidenta Michelle Bachelet, como con su subsecretario, Mahmud Aleuy.

Salida de Cristián Riquelme

El pasado 17 de febrero el administrador de La Moneda, Cristián Riquelme, cercano al ex ministro del Interior Rodrigo Peñailillo y uno de los últimos representantes del G-90 en el gobierno, oficializó su renuncia en medio de los cuestionamientos por su vínculo con el bullado caso Caval. La noticia fue dada a conocer por Jorge Burgos quien interrumpió sus actividades en la Región de Los Ríos.

Entre fuertes suspiros y evidentemente molesto, el ministro indicó esa calurosa tarde que “el director de la división de administración de la Presidencia de la República ha tomado la decisión de renunciar a su cargo. Renuncia que formalizará por escrito cuando termine su feriado legal. Eso es lo que quería informarles esta tarde“.

Junto a ello, y consultado por si se le solicitó la renuncia o fue presentada por iniciativa de Riquelme, Burgos afirmó que “existen partos naturales y partos inducidos“.

Viaje de Bachelet a La Araucanía

En diciembre pasado, Michelle Bachelet sorprendió a todos al visitar por primera vez en 21 meses la Región de La Araucanía. Su ministro del Interior, Jorge Burgos, también fue “sorpendido”, ya que no fue incluido en el viaje y recién fue informado cuando se producía el traslado.

Anteriormente, el DC había declarado ser partidario de que la visita que realizara la Mandataria tenía que ser lo más pública posible y que sería una buena idea realizar un consejo gabinete con todos los secretarios de Estado.

Según se informó en ese entonces, el secretario de Estado se habría enojado de sobre manera con la Presidenta, por lo que al día siguiente se reunió con ella para discutir sobre el tema, e, incluso, presentó su renuncia. Esa vez no se le aceptó.

Aborto

El proyecto de despenalización del aborto en tres causales despertó diferencias dentro de la Nueva Mayoría, especialmente en la Democracia Cristiana. A ellas se sumó Burgos. Durante una entrevista con CNN Chile, presentó sus reparos respecto a la causal de violación dentro del proyecto.

“Si fuera parlamentario, respecto de la tercera causal (violación) estaría en un momento de duda (…) prefiero responder con honestidad”, sostuvo al canal, despertando fuertes críticas dentro del oficialisimo.

Enrique Rajevic

En septiembre del año pasado, Bachelet anunció a Enrique Rajevic como candidato al nuevo Contralor General de la República. Un nombre que contaba con todo el respaldo de Jorge Burgos por ser cercano a él y a la DC.

Sin embargo, su nombre rápidamente comenzó a ser cuestionado luego de que se diera a conocer una demanda que interpuso el Consejo de Defensa del Estado (CDE) el 2010, a causa de una millonaria deuda que el actual candidato sostenía con el fisco a través del entonces Ministerio de Planificación y Cooperación (Mideplan).

A raíz de esto y el poco apoyo de parte de los parlamentarios, finalmente Michelle Bachelet decidió elegir a Jorge Bermúdez, quien no contaba con todo el respaldo del ministro del Interior.

Agenda corta antidelincuencia

Polémica ha sido la tramitación de la Agenda Corta Antidelincuencia impulsada por el Gobierno, principalmente por Jorge Burgos. Por un lado, el control preventivo de identidad y las sanciones a periodista que revelen información reservada de una investigación judicial, han sido los puntos álgidos dentro de la discusión que se ha generado.

El ministro del Interior se vio enfrentado recientemente con la bancada PS, quienes tras la aprobación del proyecto en la Cámara de Diputados anunciaron que recurrirían al Tribunal Constitucional para impugnar la decisión. Ante esto, Burgos sostuvo: “No suena muy bien que una bancada oficialista o un grupo de una bancada oficialista lleve al Tribunal Constitucional un proyecto de su gobierno, para qué engañarnos. No suena bien”.

Relación con Ana Lya Uriarte

El viaje a La Araucanía que dejó al ministro Burgos en Santiago, fue un capítulo más dentro de la complicada relación que el secretario de Estado sostiene con la jefa de gabinete de Michelle Bachelet, Ana Lya Uriarte, quien sí estuvo presente en el viaje.

Según se ha señalado, la tensión entre ella y el ex diputado habría comenzado luego de la elección como candidato a Enrique Rajevic, ya que según Uriarte, el encargado de llevar a cabo este tema era el ministro de la Segpres.

Por otro lado, el ministro del Interior, cuestionaba que la asesora de la Presidenta esté tomando “decisiones de gobierno no le corresponden a su cargo”. Y es que la influencia de Ana Lya sobre la Mandataria era notoria, al ser parte de grandes decisiones como el nombramiento del nuevo gabinete, la renuncia del ex ministro, Jorge Insunza, y la búsqueda de los cargos vacantes que se tenían en ese entonces, la Contraloría y el nuevo titular de la Segpres.

Relación con Mahmud Aleuy

Fueron varios los momentos en que Burgos y Mahmud Aleuy se vieron enfrentados por las distintas posturas que sostenían ambos. Un claro ejemplo de esto fue lo ocurrido en agosto del año pasado con el paro de camioneros que llegó hasta Santiago y bloqueó los principales accesos a la capital.

El ministro permitió el ingreso de los manifestantes para abrir diálogo con ellos y mandar al recientemente nombrado general de Carabineros, Bruno Villalobos, para llevar a cabo esta gestión y de esta manera, buscar alternativas para permitir el ingreso de algunos camiones a la Alameda.

En una reunión que sostuvieron, Aleuy manifestó su molestia por la decisión, por lo que se retiró y no llegó a su oficina al día siguiente a la hora de costumbre, lo que despertó alarmas de una posible renuncia. Sin embargo, fue el mismo Burgos quien se encargó de ratificarlo en su puesto.

Según publicó La Tercera en ese minuto, el enojo del subsecretario del Interior fue, principalmente, por  la falta de concordancia que existía entre la postura expuesta públicamente por el gobierno y la decisión final de Burgos de permitir el ingreso de los camiones. 

Realismo sin renuncia

En el cónclave de la Nueva Mayoría realizado en agosto de 2015, la Presidenta Michelle Bachelet sostuvo que este el Gobierno iba a enfrentar una nueva etapa bajo el término “realismo sin renuncia”. Esto en referencia, principalmente, a que la situación actual “pide ser extremadamente rigurosos en la programación y calendarización de nuestros objetivos de política pública”.

Allí, asumió que su segundo mandato ha enfrentado “debilidades en lo comunicacional y en la gestión”, por lo que “tenemos que abordar nuestro segundo tiempo asumiendo, entonces, el efecto de estas dificultades, pero sin que ello signifique olvidar nuestro compromiso con la ciudadanía… Si pudiera sintetizarlo, esto es realismo sin renuncia”, sentenció.

Bachelet defendió su impronta reformadora de su administración al señalar que “algunos leyeron sólo la palabra realismo, no escucharon el sin renuncia”, quitándole el piso a su ministro del Interior, ya que él, junto al titular de Hacienda, Rodrigo Valdés, desde su llegada el 11 de mayo, habían apostado por imponer la tesis de la gradualidad en las reformas y moderar sus efectos.

La Haya

La Corte Internacional de Justicia de La Haya rechazó las objeciones preliminares de Chile declarándose competente frente a la demanda marítima presentada por Bolivia. Consultada por la decisión del tribunal internacional, Jorge Burgos indicó que “desde el punto de vista procesal es un mal resultado”.

“Nosotros creemos que habían argumentos importantes, trascendentes para que la Corte no se atribuyera competencia como lo hizo. Pero dicho eso, que es una cuestión eminentemente procesal, respecto del fondo no hay ninguna razón para tener algún temor respecto de la sólida posición jurídica chilena”, subrayó a fines de septiembre del año pasado.

Bachelet, consultada por las palabras de su ministro, explicó que su reacción fue porque “es abogado y usa términos jurídicos”. Pero un día después, Burgos, nuevamente consultado por la resolución se limitó a responder “como quedó claro, soy sólo un abogado”.