Fernando Cordero, ex general director de Carabineros: "Se ha satanizado el término represión"
A esto se suma su rechazo a las marchas, señalando que no entiende por qué el Gobierno las autoriza, "por último que las permitan y pidan a cambio una carta de crédito, donde alguien se haga responsable de los daños”.
Fernando Cordero, ex general director de Carabineros, se metió de lleno en la discusión respecto a las últimas manifestaciones registradas en el país y las constantes críticas a la labor de la policía uniformada.
El también otrora senador designado hizo un llamado a empoderar a Carabineros, “de lo contrario, comenzará a imperar la del más fuerte y el Estado dejará de ser necesario”.
Y es que para Cordero, el fin de la dictadura dio origen a una serie de cuestionamientos a la labor policial, expresando que “cuando en el ’90 cambió el gobierno militar a los democráticos, en que se perdió por muy poca diferencia, desde ese minuto malos consejeros estimaron que para aumentar esa brecha y atraer más gente, había que sacar normas que alejara a las personas de Carabineros, y es así como aparecen las leyes Cumplido, la despenalización del delito de ofensas y maltrato de obra”.
Junto con ello, descarta que Carabineros haya cometido violaciones a los derechos humanos durante los 17 años del gobierno de facto de Pinochet, recalcando que “eso no existe, sin embargo, nos fueron amarrando de manos. Hoy nos insultan, apedrean, quitan la gorra, ¡y el costo es cero! Se relajaron las leyes, vino el nuevo sistema procesal penal que es absolutamente garantista, y todo se ablandó”.
Además, “hay un sector de izquierda fuerte que nunca estará de acuerdo porque Carabineros restringe, y se ha satanizado el término represión. El Instituto de Derechos Humanos a través de su directora (Lorena Fries) nos sigue atacando, en circunstancias que deberíamos ser aliados; no hay ninguna otra institución o agrupación en Chile que proteja tanto los derechos humanos como nosotros”.
Fernando Cordero se mostró abiertamente a favor de la reposición de la detención por sospecha, indicando “que digan ahora que el control preventivo de identidad se prestaría para discriminaciones es una estupidez. Me duele que diputados en vez de centrarse en los beneficios, difundan por los medios intencionalidades, dudando de la acción de Carabineros, en circunstancias que está avalada por el respaldo de la comunidad”.
“A mi juicio, deberían sacar una ley de encapuchados. Y ser más claros en los conceptos y separar las situaciones. Los encapuchados —según la opinión pública—, son hoy los más deleznables individuos, pero si resulta ser un estudiante o comunero mapuche, ipso facto se convierte en una víctima de la represión policial. Ni hablar si termina herido, ¡puede alcanzar la categoría de mártir!”, expresó a revista Caras.
A esto se suma su rechazo a las marchas, señalando que no entiende por qué el Gobierno las autoriza, “por último que las permitan y pidan a cambio una carta de crédito, donde alguien se haga responsable de los daños”.