Alzas de sueldo “express”: el mecanismo con el que 42 funcionarios de Gendarmería elevaron su jubilación

Se suceden los escándalos que afectan a Gendarmería. El “jubilazo” indignó a Chile al mostrar pensiones que superan los 5 millones de pesos de diversos ex dirigentes. Esta información surgió con la publicación por parte de Radio Bío-Bío, de la pensión de Myriam Olate, ex esposa del presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade.

Luego, haciendo frente a las críticas de esta institución, el ministerio de Justicia, del que depende Gendarmería, informó que cursaría una importante cantidad de desvinculaciones, ya que se encontraron licencias médicas de más de 2 mil días de duración.

Se conformó una comisión investigadora en la cámara baja, para investigar esta situación y más encima el Ministerio Público designó a la fiscal Tania Sironvalle, de la unidad de Alta Complejidad de la zona Centro Norte, para que investigara.

La Contraloría indaga estas alzas de sueldo y podría remontarse hasta 10 años atrás y, tras este calvario de menos de dos semanas, el director de la Institución, Tulio Arce, ayer dejó su cargo, en paralelo que el Consejo de Defensa del Estado investiga posibles fraudes al fisco.

El Mercurio en esta jornada, publica una investigación que explica cómo es posible que una persona pueda repentinamente alzar su jubilación a estos montos, que indignaron a todos los chilenos.

Entre el 2014 y el 2016, se jubilaron 198 funcionarios. El 71% de estas pensiones supera los 1,8 millones de pesos –tope fijado por el Contralor Jorge Bermúdez desde junio. Son 142 personas.

Además la información de transparencia indica que al menos 42 funcionarios experimentaron alzas de sueldo, en los dos años anteriores a su jubilación (tal y como Myriam Olate) lo que equivale al 21% de todos los pensionados de la institución en el período. De estos 18 son civiles y 24 uniformados.

Hay 6 pensiones sobre los 5 millones. La única civil que obtuvo esto es Olate. El resto son uniformados: ex directores regionales Marco Fuentes y Juan Letelier, los subdirectores operativos Luis Camino Farías y Carlos Cortés, y el coronel Javier Becerra, ex director regional y ex jefe de recursos humanos. Ellos tuvieron alzas de grado en los dos años anteriores a su jubilación, después de haber tenido carreras que duraron entre 21 y 30 años.

Carlos Cortés, profesor de educación básica, con 34 años de servicio, pasó a ser director regional metropolitano en diciembre del 2013 a subdirector operativo en 201. Pasó de grado 4 a 3 y su sueldo aumentó de 2,2 millones a 5,2 millones. Renunció tras tres meses y obtuvo una pensión de 5,1 millones de pesos. Otro subdirector operativo, Luis Camino, fue nombrado en mayo del 2013, y pasó también de 4 a tercer grado de  sueldos. Renunció a los 8 meses. Su último sueldo fue de 3,7 millones y su jubilación es de 5 millones 400 mil pesos.

Además, en el caso de Cortes, por ejemplo, hubo un aumento de la asignación por función crítica. E monto varió entre septiembre y noviembre de 2013 en un 22,4%.

El caso de la duración en el cargo también es un punto complejo. Luisa María Valenzuela es asistente social, y era jefa técnica de la región de Arica y Parinacota. Subió de grado 9 a 7 en octubre de 2014 y pidió retiro en diciembre de ese año. El grado le significó un aumento de 900 mil pesos en su remuneración líquida y una pensión de poco más de 2 millones.

Consultados en la Dirección Nacional de Gendarmería, optaron por no hacer declaraciones.