Diputados indagan posible “jubilazo” de familiares de generales (r) del Ejército
La Comisión investigadora que está revisando posibles irregularidades en las abultadas pensiones en Gendarmería recibió un oficio de la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (Capredena). Serían 36 casos que superan el límite legal que fijó la Contraloría.
Hay una comisión investigadora de los diputados que está revisando todos los antecedentes del llamado “jubilazo” de Gendarmería, en la que múltiples ex funcionarios se encontraban recibiendo pensiones que superaban los 5 millones de pesos.
Pero no se quedó sólo en la entidad penitenciaria, cuyas jubilaciones se rigen por la Dirección de Previsión de Carabineros de Chile (Dipreca), sino que también se extendió a las Fuerzas Armadas, las que cuentan también con un régimen distinto al del resto de los chilenos -la mayoría en el sistema de AFP, altamente cuestionado por las bajas pensiones que termina otorgando- en la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (Capredena).
La Tercera revela que esta institución envió un oficio, después de que el diputado Leonardo Soto (PS) había solicitado el detalle de las personas que recibieron pensiones entre 1998 y 2016, por sobre el límite legal de 60UF (poco más de 1 millón 500 mil pesos) que fijó Contraloría en 1998.
Si bien la información que entregó Capredena es más bien acotada a los funcionarios de ese organismo que recibieron las citadas jubilaciones, en el escrito se detalla una lista de 36 personas en esa situación, la que será analizada la próxima semana por el Contralor Jorge Bermúdez.
El vicepresidente ejecutivo de Capredena, Cristián Rojas, más bien plantea que esta información debe solicitarse a la subsecretaría del Ejército.
Pese a todo, un punto será investigado por la comisión: el por qué se entregó pensiones por sobre el límite legal a ex funcionarios que tienen vínculos familiares con generales (en retiro) del Ejército. El diputado Soto asegura que les llama la atención “la vinculación familiar de algunos de ellos con personeros que pertenecían al alto mando de las ramas de las Fuerzas Armadas. Es posible que haya habido una influencia para esas pensiones de privilegio. Eso es lo que investigaremos”.
Por ejemplo, a partir del 29 de octubre de 2010, María Verónica Forestier Ebensperger, hija del fallecido general Forestier, y a su vez cuñada del ex comandante en jefe Juan Emilio Cheyre, recibe una jubilación de más de 3 millones de pesos.
O el caso de Patricia Fátima Ewig Pinochet, hermana del otrora jefe del Estado Mayor de la Defensa Nacional y segunda autoridad jerárquica del Ejército en el 2008, Alfredo Ewig Pinochet –el mismo que se hizo conocido el 2012 cuando integró el Consejo Nacional de Educación que modificó la palabra “dictadura” por “régimen militar” en los libros de historia para alumnos de primero a sexto básico. Ewig recibiría según el informe una pensión de 4 millones 868 mil, que comenzó a percibirla el 25 de enero del 2010, en su calidad de ex vicepresidenta de Capredena. Dos años antes, sin embargo, había salido de su cargo en medio de un proceso de remoción impulsado por quien fuera ministro del Interior en ese entonces, Edmundo Pérez Yoma.
