Frenan prueba de anticonceptivo para hombres por generar malestares idénticos a los que viven las mujeres
Según los investigadores a cargo de estas pruebas, 39% de los síntomas reportados no estaban vinculados con las inyecciones. Los efectos colaterales consideraban “depresión, dolor muscular, cambios de ánimo, acné, y cambios en la libido”.
Tras un extenso estudio de 4 años, un grupo de investigadores concluyó que una inyección de progestina y una forma sintética de testosterona detuvo en un 96% los embarazos de un grupo de mujeres, cuyas parejas (320 hombres), se sometieron a este método anticonceptivo.
Al final del estudio, un 75% de los hombres participantes se manifestó a favor de continuar usando este método anticonceptivo.
Sin embargo, de acuerdo publica Buzzfeed, un comité independiente detuvo esta prueba por “razones de seguridad”, después de que 20 participantes concluyeran su papel en el estudio al experimentar efectos colaterales.
Seis hombres terminaron la prueba por cambios de ánimo, seis por acné, dolor o “pánico” a las inyecciones, palpitaciones, hipertensión o disfunción eréctil. Ocho personas dejaron esta prueba por presentar más de un síntoma.
Si bien los investigadores plantearon que un 39% de los síntomas no estaban relacionados con estas inyecciones.
Asimismo, el estudio también instaló un tema vinculado al impacto de esta droga en la fertilidad. Después de un año, ocho participantes no había recuperado su fertilidad, y dentro de estos cuatro años, un hombre parcialmente la había recuperado.
El comité planteó que sus mayores preocupaciones apuntaban a los “cambios de ánimo, depresión, dolor en el lugar de la inyección y libido incrementada” en los hombres.
Algunas usuarias en Twitter se quejaron de esto, y mencionaron un estudio, que duró 13 años, que establecía que las mujeres que tomaban un anticonceptivo combinado eran un 23% más propensas a que les prescribieran antidepresivos versus las que no estaban utilizando un método anticonceptivo hormonal. Las niñas adolescentes en la píldora también tenían el doble de posibilidades de usar antidepresivos.
Los efectos secundarios incluían también cambios de ánimo, aumento de peso, acné, nausea, dolores de cabeza y baja en la libido.
La píldora, según un estudio en mujeres australianas, establecía que su uso aumentaba el riesgo de quel as mujeres sufrieran cáncer mamario, coágulos de sangre y ataques.