Concejal de Ñuñoa en picada contra Sabat por acusación de soborno: "Son manotazos de ahogado"

El lunes, el ex alcalde de Ñuñoa Pedro Sabat -formalizado por presunto fraude al fisco en el caso basura- declaró en la Fiscalía y acusó que el concejal DC Jaime Castillo le ofreció 100 millones de pesos para que que el retiro de los desechos en la comuna fuera adjudicado a la empresa Dimensión.

Según Sabat, no aceptó la oferta. “Yo lo mandé a la ‘mierda’ y que se fuera de mi oficina”, contó. “Castillo me dijo que me perseguiría hasta el final de mis días, lo que ha hecho desde esa época, puesto que desde ahí siempre votó en contra de mis propuestas importantes”.

Ante estas declaraciones, el concejal Jaime Castillo  aseguró que son “versiones absolutamente falsas” y que lo lamenta tener que “recurrir al expediente de declaración pública como elemento clarificador“. “Lo hago dado a que  los dichos de Sabat, publicados en diferentes medios, carecieron de la necesaria confrontación de opiniones, no obstante ser un hecho lesivo para la honra de una persona, en este caso, yo”, dijo en una declaración pública.

Castillo relata que “la situación lo desespera, da ‘manotazos de ahogado’. actúa fuera de sí ante una eventual condena:  amenaza, miente, inventa y recurriendo a prácticas machiavélicas quiere pasar de acusado a acusador, para ello nada mejor que pretender involucrar a sus propios demandantes con inventos inverosímiles
que existen solo en su imaginación y que se caen por la debilidad de su peso. ¡Miente, miente, que siempre algo queda!  Una situación patológica, al parecer”.

De acuerdo al concejal, “Sabat adjudicó la propuesta de motu propio con la mayoría  de votos del Concejo en contra “, pidiendo que explique por qué. Además, el concejal destaca que su hermano Claudio Sabat, era gerente de una las divisiones de KDM  al momento en que hizo negociaciones sobre depósito de basuras en
vertedero de esta misma empresa.

“Sus bienes y recursos económicos  exceden largamente las posibilidades  del sueldo de alcalde, más de $750 millones no tendrían sustento. Abrieron sus cuentas bancarias. Se indaga sobre propiedades en Curacaví, Santiago, Ñuñoa, Chicureo y Las Condes”, agregó.

Castillo dice que la acusación es “imposible” porque “en esa época, como ahora, no nos hablábamos, todo el municipio y prácticamente la comuna lo sabe. Además curioso: ¡por qué no lo denunció de inmediato! La condición de autoridad y funcionario público exige denunciar en el acto la ocurrencia de este tipo de situaciones. Hacerlo 5 años después evidencia falacia, invento, triquiñuela, infantilismo, “sacada de pillo” en buen chileno. En otro plano, incumplimiento de deberes como autoridad”.

“Su versión, absolutamente falsa, es insustentable. Él mismo se encargó de publicitar, a modo de justificación por la existencia de cámaras y micrófonos ocultos descubiertos en la alcaldía, que todo lo grababa  como forma de transparentar sus actuaciones, que su oficina era un bunker con cerraduras eléctricas que sólo él accionaba. ¡Que muestre lo  grabado en la supuesta conversación! Imposible, no existió, es un invento”, finaliza.