Lucía Hiriart en declaración por caso CEMA Chile: “Por mí no pasaba ni un centavo”
La viuda de Augusto Pinochet precisó que en la institución sí se vendieron inmuebles, pero esto ocurrió para poder financiar el funcionamiento de la entidad de beneficencia. “Nunca se distrajeron esos dineros para fines particulares, ni míos ni de mis familiares”.
Por cerca de dos horas se extendió la declaración que la viuda de Augusto Pinochet, Lucía Hiriart, prestó ante el ministro Guillermo de la Barra, en el contexto del caso CEMA Chile, que indaga eventuales desvíos de dineros –obtenidos tras la venta de inmuebles donados por el estado- a particulares, como la familia de la ex presidenta de la institución.
En esta comparecencia, cuyo contenido revela en esta jornada El Mercurio, Hiriart –quien declaró como inculpada- repasó la historia de la entidad, de la que se hizo cargo en 1973 y que se dedicaba, según ella, a ayudar principalmente a las madres de zonas rurales embarazadas.
Ante el ministro de la Barra, quien gestionó la declaración con Marco Antonio Pinochet, Hiriart aseguró no recordar la cantidad de inmuebles que fueron legados por el estado, y afirmó que la venta de estos era una decisión, que adoptaba el directorio, para poder tener dinero para pagar remuneraciones y otros gastos. La definición del valor, según declaró la mujer, pasaba por esa instancia, y las finanzas habrían sido revisadas por el administrador y el fiscal de la institución.
“Todos los dineros producto de esas ventas volvieron al patrimonio de CEMA Chile. Nunca se distrajeron esos dineros para fines particulares, ni míos ni de mis familiares. Tampoco para algún integrante de la junta directiva. Todos los dineros fueron enterados a CEMA-Chile. Por mí no pasaba ni un centavo. Sí recuerdo a Julio Véjar, a quien yo contacté par que trabajara en CEMA Chile como administrador o gerente”, declaró Hiriart.
Además, respecto de la devolución de estos inmuebles al estado, la viuda de Pinochet manifestó que “si los bienes raíces que actualmente posee CEMA no están siendo utilizados para los fines de la fundación, pienso que sí podrían ser devueltos al Estado, o alguno de ellos, porque creo que existe todavía un voluntariado importante que todavía quiere seguir trabajando en CEMA Chile. En lo personal me gustaría que el Estado contribuyera con CEMA Chile, tal como lo hace con otras instituciones de voluntariado“.