Dos días antes de donación, Chile recibió oferta de empresa del SuperTanker por US$10 millones al mes
El gobierno se encontraba analizando el ofrecimiento de parte de la firma que gestiona a la mega aeronave. El primer ofrecimiento llegó el 21 de enero y tras los mensajes de Lucy Avilés, finalmente el 25 aterrizó en nuestro país.
Un contrato de arriendo por 30 días, por un costo diario de 331 mil 200 dólares (que ascendía a un total de 9 millones de dólares o 6 mil 349 millones 104 mil pesos) fue la oferta que recibió el gobierno el 21 de enero, para poder usar el Global SuperTanker en pleno contexto de los incendios que devoraban parte de la zona centro-sur del país.
Esta oferta llegó vía correo electrónico, según publica El Mercurio, de parte de la empresa controladora de la aeronave. En el mail enviado por Dieter Linneberg también se pedía, en caso de acceder al contrato, tener combustible para la operación y el regreso a Estados Unidos, además de agua y agentes retardantes, además de dos vehículos.
Esto ocurrió dos días antes de que comenzara a hacerse conocido el ofrecimiento que hizo dos días después Lucy Avilés, chilena residente en Estados Unidos, para que el avión se sumara al trabajo contra los incendios. Esta donación inicialmente no fue muy bien tomada en cuenta por el gobierno, opinión que se materializó en los dichos del director de la Conaf, Aarón Cavieres. Éste planteó que con aviones de grandes tamaños, como unos C-130 brasileños –ejemplo que los puso al mismo nivel que el SuperTanker- “el agua llegó como una llovizna repartida en cualquier parte, sin ningún efecto (…) fue una llovizna inútil”.
El ministro del Interior, Mario Fernández, confirmó estas comunicaciones, y la primera oferta la calificó de “bastante alta (…) después de un par de días, una fundación ofreció pagar el importe del avión y traerlo en otras condiciones. Entre esa oferta de la fundación y el arribo del SuperTanker pasaron dos días, o sea, no hubo ningún retraso, fue súper rápido”.
