Qué califica como “conducta sexual negativa” según este manual de la Armada
Mientras están con uniforme, los funcionarios de la marina no pueden incurrir en conductas sexuales, tomarse de las manos, intercambiar frotaciones en el cuerpo, sentarse o acostarse en la misma cama y demostrarse cariño en público.
El espionaje realizado a bordo de la fragata Lynch a un grupo de mujeres integrantes de la Armada y la situación que enfrentaron otras mujeres a bordo del buque Escuela Esmeralda, en tanto dormían a torso desnudo en Hawaii.
Esos son algunos de los casos que ha debido enfrentar la Armada de Chile, los que no han demorado en cursar sanciones a los involucrados –las que se ratificaron en cuanto se publicaron los antecedentes de estos reprochables casos.
La marina estuvo en entredicho y se apuntó al reglamento interno, en la medida que no se notaba un cierto respeto de determinados sujetos de la institución para con sus pares femeninos, quienes ingresaron por primera vez a la institución en el 2007.
Emol publica en esta jornada el Manual Interno para la Escuela Naval y la Escuela de Grumetes, y se hizo énfasis desde la institución que se dedica un capítulo completo “a las normas de comportamiento, convivencia y conducta”.
“Se entiende por conducta sexual negativa a los actos sexuales que se realicen al interior de las escuelas o en otros lugares que estén bajo el control militar, por ejemplo: buques, aeronaves, o bajo circunstancias que desacrediten al Servicio o que sean perjudiciales al orden y la disciplina, que sean contrario al orden público, las buenas costumbres y el normal funcionamiento institucional”, se informa desde la Armada.
Y en este tipo de actos se incluye cualquier actividad que “podría excitar o satisfacer los deseos sexuales del actuante, tales como besos, caricias, relaciones sexuales, desnudez explícita y exposición indecente”.
Asimismo, según el manual, los cadetes y grumetes tendrán que informar de cualquier incidente que refiera a una conducta sexual negativa y también se debe mantener la puerta de la sala totalmente abierta y con luces prendidas cuando un miembro del sexo opuesto esté en el mismo lugar.
Mientras están con uniforme, los funcionarios de la marina no pueden incurrir en conductas sexuales, tomarse de las manos mientras estén con uniforme, intercambiar frotaciones en el cuerpo, sentarse o acostarse en la misma cama y demostrarse “cariño inapropiado” en público.
