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Actualizado el 3 de Abril de 2017

Garretón desmiente frase de libro-entrevista de Guillier en la que “fustigaba” a empresarios

El empresario y ex subsecretario de Salvador Allende aseguró que más bien el senador, en palabras de otro comensal, “no dijo nada, pero lo dijo tan bien”.

Por Redacción EL DÍNAMO
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Con respecto a los grandes empresarios, una vez me invitaron a comer a un restorán. Había gente de la Sofofa y CPC. Me permití hablarles con franqueza: que si siguen abusando no van a llegar muy lejos”.

Esa es la frase que básicamente coronaba una nota de este fin de semana, en Reportajes de El Mercurio, sobre un libro-entrevista del senador Alejandro Guillier llamado “De cara al país”. Junto con esos dichos, el periodista asegura, en el mismo libro para el que fue entrevistado por Raúl Sohr, que más bien su cercanía está con el pequeño y mediano empresario.

En la nota también se hace presente que el encuentro se realizó en el exclusivo restaurant Cumarú, en Vitacura, y estuvieron presentes personeros como el presidente de la Sofofa, Hermann Von Mühlenbrock, el presidente de la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica, Juan Pablo Swett, y el otrora presidente de la CPC, Lorenzo Constans.

Este lunes, otra persona que asegura haber asistido al mencionado encuentro, el empresario Óscar Guillermo Garretón, profundizó en lo que ocurrió allí, y su versión difiere de manera importante con lo publicado en el libro-entrevista.

Garretón, quien llegó a ser subsecretario en la época en que Salvador Allende era Presidente, abordó en una carta al Director de El Mercurio específicamente las frases “había gente de la Sofofa y CPC”, y “me permití hablarles con franqueza que si siguen abusando no van a llegar muy lejos”.

Fue una grata y amable conversación en un restaurante del barrio alto reconocido por su buena comida y vinos. Ningún participante lo hizo como representante de algún ente gremial empresarial y el grueso no lo éramos. Se le dio garantía de que era una reunión privada para asegurar un diálogo con franqueza; característica que deduzco agrada al senador, por la frase de él que reproduzco”.

Garretón recuerda que “a la salida, mientras caminábamos a la puerta, varios de los asistentes asentimos al escuchar el fino comentario de uno de los comensales, sobre las intervenciones del precandidato: ‘No dijo nada, pero lo dice tan bien’”.

El empresario precisa que efectivamente fueron “escasas” las definiciones de Guillier ante las consultas de los asistentes a la cena. “Recuerdo dos: su valoración de la actividad privada y su rechazo al sistema de reparto cuando se habló de pensiones y de las AFP”.

Garretón destacó la -a su juicio y presumiblemente en la misma línea que el resto de los asistentes- “amabilidad de trato del senador, tan ajena a esas críticas ácidas a la actividad empresarial que proliferan en la prensa. A decir verdad, no recuerdo haber escuchado alguna frase severa o admonitoria de él como la que transcribo en el primer párrafo. Quizás la olvidé al calor del grato ambiente que predominó en esa convivencia”.

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