“La doble moral quedó al descubierto” y otras razones de Fulvio Rossi para no repostular en cupo PS
Entre los cuestionamientos, el senador cuestiona la decisión de apoyar la candidatura de Alejandro Guillier, afirmando que no hay"claridad sobre su postura y visión respecto de los más relevantes temas políticos y sociales".
El senador Fulvio Rossi (ex PS) envió una carta abierta al presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, donde explica las razones por las que definió no repostular al Senado por la región de Tarapacá en un cupo de esa colectividad, dando una larga lista de razones y cuestionamientos a la dirigencia del partido.
Rossi afirma que es de una decisión “dolorosa” que tiene que ver con tres aspectos”fundamentales”. El primero de ellos apunta al rumbo actual del partido y la bajada de la candidatura de Ricardo Lagos, ya que a su juicio él representaba mejor la visión del PS.
En un segundo punto, el senador habla de “hipocresía y aspectos humanos”, destacando que “la doble moral y el doble standard han quedado al descubierto”. Finalmente, cuestiona la decisión de apoyar la candidatura de Alejandro Guillier, afirmando que no hay”claridad sobre su postura y visión respecto de los más relevantes temas políticos y sociales”.
Lee acá la carta:
1) Rumbo actual del Partido y “bajada de Lagos ”
Todos saben que mi candidato para representar a la coalición gobernante era el ex Presidente Lagos. Lo cual no sólo se debe a la historia , trayectoria , liderazgo y atributos del ex Presidente, que son por todos conocidos y reconocidos sino también por el tipo de socialismo que Lagos representa: Un socialismo democrático, moderno, abierto al diálogo y capaz de construir grandes acuerdos con otras fuerzas políticas. Un socialismo con vocación de mayoría que fue capaz de articular un gran entendimiento entre el centro y la izquierda chilena que le dio al país los mejores 20 años de su historia.
Una exitosa historia de la cual hoy el PS reniega. Porque seamos francos, el día que el Partido Socialista baja a unos de los mejores de los nuestros estaba dando un portazo a la proyección de una alianza entre el centro y la izquierda y de paso deshauciando la realización de elecciones primarias presidenciales, ya que ponía a la Democracia Cristiana en un escenario imposible; y como decía Almeyda: “a lo imposible nadie está obligado “.
¿Como poder explicar que el Partido Socialista abandona su rol de articulador de este virtuoso entendimiento para Chile?
Probablemente existan (más allá de las razones más bien personales y de corto plazo que son las más de las veces mezquinas y pequeñas) razones para explicar este viraje que encuentran su origen en la incapacidad del Partido para enfrentar a esta nueva izquierda totalitaria y reaccionaria que con una mirada refundacional de la política y de la historia hizo que muchos socialistas se sintieran amenazados e incluso acomplejados frente al populismo infantil y predecible con un ideario lleno de ideas añejas y de baja densidad intelectual.
Hoy el PS pretende profundizar un polo de izquierda para disputar un pequeño nicho del electorado en donde ellos y no nosotros son “el original”.
Grave error, especialmente porque aunque algunos quieran matarla, la alianza entre el centro y la izquierda sigue viva, porque existen muchos y muchas chilenos y chilenas que hoy nos demandan una urgente rectificación.
Aunque lamentablemente todas y cada una de las decisiones que ha tomado el Partido Socialista van en la dirección contraria. A ello se suma la bajada de Insulza y Atria a los que se le prometió primarias. Primarias que todos sabíamos que nunca se harían.
2) Hipocresía y aspectos humanos
He vivido 2 años y 4 meses muy duros. Los más difíciles de mi vida. No sólo he sufrido descalificaciones destempladas y desproporcionadas que habitualmente sacan lo peor de la gente: la cobardia y el oportunismo, sino también una persecución política sin precedentes en la historia reciente.
Después de 2 años y 4 meses de profunda y exhaustiva investigación el fiscal a cargo ha señalado que no hay indicios de comisión de delitos. Sin embargo altos dirigentes del Partido han intentando utilizarme de chivo expiatorio para sus propias malas prácticas.
Hoy esos mismos dirigentes escabullen de su propia responsabilidad frente a la militancia, cuando se han dado a conocer las inversiones del PS, llegando incluso a la vileza de culpar a la Comisión de Patrimonio.
La hipocresía duele, especialmente cuando viene de quienes consideramos cercanos.
Lo que hoy la ciudadanía más crítica no son los potenciales conflictos de interés en el marco de inversiones en empresas reguladas, sino la hipocresía de aquellos que no dan la cara, culpan al resto y más encima son capaces de apuntar a otros con el dedo.
La doble moral y el doble standard han quedado al descubierto.
Finalmente decir que el colmo de la hipocresía es que la Nueva Mayoría apoye a Jorge Soria quien ha hecho un tremendo daño a la región. No podría por lo mismo compartir la misma lista con una persona que encarna lo peor de la política (no olvidemos su apoyo a Sebastian Piñera y su posterior voltereta).
3) Tema presidencial.
Para mí, como creo que para la mayoría de los dirigentes políticos, “el casarse” con una candidatura presidencial implica sentirse fuertemente convocado y seducido por el liderazgo y las ideas del candidato. Esto pesa mucho más cuando uno goza la condición de independiente ya que el hecho de ser militante de alguna manera obliga a entregar apoyo al candidato al cual el Partido respalda.
Tengo mucho respeto por la trayectoria profesional de Alejandro Guillier y creo que está haciendo un esfuerzo genuino para derrotar a la derecha en noviembre. Sin embargo no tengo claridad sobre su postura y visión respecto de los más relevantes temas políticos y sociales.
Finalmente Alvaro, permíteme decirte, por la amistad de años que nos une, que lamento el difícil momento que estás viviendo a partir de la difusión de una investigación respecto de las inversiones del partido, más aún, cuando tú no tuviste participación alguna en aquellos hechos.
Agradecer a mi bancada por el permanente respaldo político y humano que jamás olvidaré y un mensaje a las futuras generaciones: “No es revolucionario repetir consignas añejas y sobreideologizadas. Revolucionario es enfrentar el populismo de izquierda con valentía y no la mediocridad que he visto en estos tiempos”.
Enfrentaré ahora en el Norte Grande una dura batalla contra el campeón de las malas prácticas, Jorge Soria, y que paradojal y contradictoriamente ira en vuestra lista”.