Jorge Sharp critica acuerdos del Frente Amplio para presidir la Cámara: “¿Quién dijo que eso era una prioridad?”
El alcalde critica "la parlamentarización de la fuerza" pensando en "presidir uno de los poderes del Estado con mayores grados de deslegitimidad", y apunta a la refundación de la política en Chile.
“La política chilena hoy vive un momento estratégico. Incluida la derecha, a todas las fuerzas políticas del país las cruza un debate que tiene una trascendencia, no solo en lo inmediato, sino que en 20 años más”, afirma el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, en un análisis realizado en una entrevista en El Mostrador, donde se refiere a su visión del Frente Amplio y la izquierda en Chile.
El edil afirma que este sector “carece de unidad estratégica, política y programática” y que “es un momento de definiciones”, haciendo un llamado a los partidos de la Nueva Mayoría. “El Partido Socialista tiene que definirse, va a seguir en lo que algunos autores determinan como la línea del progresismo limitado, o bien va a volver a sus orígenes y se va a declarar como un partido antineoliberal. El PPD, ¿qué curso va a tomar? El Partido Comunista va a seguir insistiendo en esta alianza amplia desde la DC hasta el FA, cuando la DC dijo que no estaba disponible, y en el FA hemos dicho que no nos parece que ese sea el camino”, cuestiona.
“Fue calamitoso lo que sucedió y no ha habido ninguna autocrítica, y es brutal, no han dicho nada, salvo tres o cuatro personas. Le han echado la culpa a Guillier, que era un mal candidato, y al Gobierno, que no ha ejercido una buena conducción, cuando el Gobierno logró avanzar en materia de reforma al sistema político, sin prejuicio de que el Gobierno pueda tener alguna responsabilidad. ¿Pero cuál es la autocrítica qué hacen?”, critica.
En esa línea, el alcalde afirma que habrá “encuentros” en el Congreso para votar ciertas leyes pero que es necesaria una crítica profunda de la centroizquierda para evitar seguir el camino de la Democracia Cristiana: “el de la irrelevancia política”. “Requerimos un debate profundo entre el campo de la centroizquierda y la izquierda, y no alianzas entre gallos y medianoche, que al final van a terminar cayéndose al día siguiente”, dice.
“Con nosotros no partió la política, con nosotros las ideas de cambio social no partieron, sino que nosotros hoy día estamos jugando un rol muy importante en el país, porque hemos sido capaces de articular una propuesta política que ha logrado convocar a amplios sectores sociales, pero nosotros no inventamos la rueda. (…) El Frente Amplio tiene que tener como prioridad no presidir la Cámara de Diputados, ¿quién dijo que eso era una prioridad, dónde se discutió?“, cuestiona, en referencia a las conversaciones que ha tenido Giorgio Jackson y Gabriel Boric con el oficialismo.
“Debemos evitar la parlamentarización de la fuerza, nuestra acción central no puede ser esa, no puede estar en presidir uno de los poderes del Estado con mayores grados de deslegitimidad”, explica, agregando que “hay que tener claro que en lo estratégico nosotros no vinimos a reemplazar a una elite concertacionista o de iluminados sino que nuestra apuesta es la refundación de la política. El Frente Amplio no está llamado a reemplazar a la élite concertacionista, está llamado a refundar, junto a otros actores, la política en Chile”.
En esa línea, el alcalde del Movimiento Autonomista explica que en Valparaíso “estamos enfrentando desafíos que a ninguna otra fuerza, ningún otro actor en el Frente Amplio le ha tocado trabajar”.
“Nosotros no estamos en contra del sistema económico ni de la inversión privada, creemos que el actor privado en los territorios juega un rol muy importante, el problema se produce cuando dicho actor no cumple con la ley (…). Yo pienso que el empresario en Chile tiene que entender que el país cambió. No porque sean poseedores de riquezas gigantescas van a poder llegar a Valparaíso a hacer lo que quieran”, afirma.
Y concluye que “en Valparaíso lo que estamos demostrando es que sí se puede gobernar, sí se pueden hacer las cosas, respetando la ley, sin un actuar sobreideologizado, pero sí se puede gobernar poniendo por delante los intereses de la ciudadanía, la calidad de vida. Lo que nosotros hacemos es intentar democratizar la forma en la que la riqueza está distribuida, porque hoy día la riqueza está concentrada”.