“Muerte al fleto”: brutal denuncia de homofobia en el corazón del gobierno de Bachelet
En reiteradas oportunidades el trabajador recibió amenazas de muerte y trato vejatorio por parte de un dirigente de funcionarios.
“Muerte al fleto Lucero”, decía el mensaje que José Miguel Lucero encontró en su escritorio el 28 de noviembre pasado. Estaba hecho de recortes de revistas y estaba clavado con un cuchillo en su mesa de trabajo del Ministerio Secretaría General de la Presidencia.
Apenas vio la amenaza, el funcionario de la Unidad de Compras de la Segpres tomó fotos y habló con un abogado del ministerio. Luego llegó la PDI y José Miguel Lucero interpuso una denuncia por amenazas de muerte, que aún están siendo investigadas por el Ministerio Público, publica El Mostrador.
Sin embargo, ese no es el único suceso que el trabajador ha tenido que enfrentar en ese lugar por su orientación sexual.
En su trabajo, Lucero había recibido otra carta amenazante. “Esta es la última advertencia, no abrá otra carta (SIC). Ándate de la Segpres o te vamos a matar, conocemos todo cobre ti, te queremos muerto, con nosotros no se juega maricón reculiao, donde te pillemos te matamos reconcha de tu madre, te queremos bien muerto y lejos de aquí, eres una mierda de persona”, decía el mensaje.
Otro de los episodios violentos y más denigrantes de los que fue víctima ocurrió una tarde cuando tomaba té con su pareja. Abrió su mochila para buscar un libro, pero como no daba con el objeto se acercó aún más. En ese momento sintió un olor muy fuerte y vio que al interior habían papeles higiénicos con excremento. Tomó fotos, llamó a su jefe directo y una hora después se reunió con él para detallar los hechos que originaron un sumario.
Tras ese hecho se abrió un sumario interno en la Segpres. En su testimonio, José Miguel Lucero apuntó a Manuel O, un dirigente de la Asociación de funcionarios, como su agresor directo, quien tenía un trato vetajorio con él. A lo largo del año de discriminación, el funcionario sufrió cuadros de angustia, insomnio, estrés, visitas al psiquiatra y un periodo de licencia.
En paralelo a su frágil estado emocional, se enteró que el sumario no llegó a ningún puerto y se cerró incluso sin que se le notificara de manera oficial.
Desde la Segpres señalaron que se “ha llevado adelante diferentes acciones en pos de una sana y respetuosa convivencia laboral, tales como la redacción y puesta en marcha de un Código de Ética Laboral y diferentes mediciones sobre clima laboral, entre otras medidas”.
Hace un mes el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ofició a la Segpres solicitando que se informara al ministro Gabriel de la Fuente sobre el caso de José Miguel Lucero. En el documento se apuntaba a los numerosos convenios suscritos por Chile en torno a los Derechos Humanos, la homofobia y la protección que el Estado debe otorgar a quienes sufren este tipo de persecuciones. Ahora la Segpres tiene un plazo de 10 días para responder el requerimiento del INDH.