Condenan a gendarmes por agresiones graves contra internos que cumplían prisión preventiva en cárcel de Chillán
Dichas agresiones ocurrieron luego de que con ocasión de un reclamo de algunos internos, se procediera a un procedimiento de control y registro de los más de cien reclusos, establecido en su reglamentación interna.
El Juzgado de Garantía de Chillán condenó a un grupo de gendarmes por el delito de aplicación de tormentos o apremios ilegítimos en contra de tres reclusos del Centro de Cumplimiento Penitenciario de dicha ciudad, hechos que ocurrieron en marzo de 2016.
Según se relata en el fallo, durante un control rutinario y registro de los internos efectuado en el patio de imputados, los gendarmes “procedieron a irrespetar el trato digno que el desempeño que su función pública importa, agrediendo de manera irracional e innecesaria” a tres de los internos, todos quienes se encontraban en prisión preventiva.
Dichas agresiones ocurrieron luego de que con ocasión de un reclamo de algunos internos, se controlara a más de 100 reclusos, establecido en su reglamentación interna.
“Mientras se desarrollaba dicha actividad y apartándose de los deberes de control, cuidado y protección que su labor les imponía, los acusados trasladaron a los tres internos a otro sector del recinto procediendo a castigarlos intencionadamente por la supuesta participación de las víctimas en el reclamo previo, infringiéndoles dolor y sufrimiento mediante agresiones físicas injustificadas y denigrantes que los afectaron física y emocionalmente”, se lee en el fallo.
Dos de estos gendarmes fueron condenados a 541 días de presidio por los apremios y lesiones leves, en contra de uno de los internos, mientras que otros cuatro fueron condenados a 818 días de presidio como autores del delito de aplicación de tormentos o apremios ilegítimos físicos o mentales y lesiones menos graves.
En tanto, una condena de 3 años de presidio recibió otro funcionario de Gendarmería por el delito de lesiones graves y aplicación de tormentos o apremios ilegítimos físicos o mentales contra otro de los internos del penal.
El tribunal sustituyó el cumplimiento de la sanción privativa de libertad impuesta por la pena de libertad vigilada intensiva y por remisión condicional.