Aguas Andinas implementa transformación estratégica para abordar “triple cambio climático”
Con esto, la compañía sanitaria busca hacer frente a cambios ambientales, sociales y tecnológicos.
Aguas Andinas anunció que está abordando una profunda transformación estratégica para hacer frente a lo que considera “tres cambios climáticos”, siendo éstos el cambio climatológico, el cambio climático social y el cambio asociado a los avances tecnológicos.
El primero de estos tiene que ver con las consecuencias en la disponibilidad de los recursos hídricos. Mientras que el segundo alude los roles de consumidores y ciudadanos que se han unido y elevado las exigencias sobre las empresas; y el tercero, se relaciona con la digitalización de los procesos y la inteligencia artificial, propiciando respuestas mejores y más eficientes ante las necesidades de los clientes, comunidades y el país.
“Nuestra prioridad es entregar servicios con calidad, continuidad y seguridad a nuestros clientes”, comentó Guillermo Pickering, presidente del directorio de Aguas Andinas, en la junta de accionistas de la firma. En su discurso, Pickering dio cuenta de la evolución de las inversiones e iniciativas de la compañía, que en 2017 alcanzaron a $ 131 mil millones, no sólo en infraestructura, sino en “gestión, que también es resiliencia y sustentabilidad”.
Entre las inversiones en infraestructura destacan los mega estanques por $ 61 mil millones que se están construyendo en Pirque para dar más autonomía al sistema de agua potable de Santiago y las obras complementarias de emergencia por $ 15 mil millones para almacenamiento de agua potable y habilitación de pozos, dos iniciativas que aumentarán la resiliencia de la ciudad con una respuesta concreta ante los desafíos que plantea el cambio climático.
Resalta también la nueva planta de agua potable en Colina, una instalación de $ 15 mil millones que estará en operación en el segundo semestre de este año, con una capacidad inicial de producción de 500 litros por segundo y que se abastecerá con aguas transportadas desde el río Maipo, a más de 60 kilómetros de distancia.
La compañía igualmente está avanzando en la transformación de sus plantas de descontaminación de aguas servidas en biofactorías. “En el pasado, las plantas de tratamiento perseguían descontaminar nuestros ríos y playas, eliminando los riesgos para la salud de las personas. Hoy convertidas en generadoras de energía eléctrica, térmica, y gas natural, están llamadas a jugar un rol protagónico en el futuro y ello nos acerca a nuestro compromiso de lograr una operación sustentable, con cero impactos ambientales negativos”, comentó Narcís Berberana, CEO de Aguas Andinas.
Ampliación de capacidad
Aguas Andinas está desarrollando una serie de obras para ampliar la capacidad de sus sistemas de agua potable con la construcción de plantas elevadoras y estanques de regulación en distintos lugares de la Región Metropolitana y de sus plantas de tratamiento de aguas servidas en localidades.
Este plan considera levantar estanques en Paine (inversión de $ 1.600 millones) y El Monte ($ 1.356 millones) y una estación de presión variable (PBP) en Quinta Normal ($ 1.103 millones), por ejemplo. Asimismo, las iniciativas implican ampliar, entre otras, las PTAS de Talagante (UF 228.459), Buin-Maipo (UF 159.288) y El Monte (UF 122.474).
Parte de estas inversiones se financiarán con el bono verde y social por UF 1.500.000 que Aguas Andinas colocó la semana pasada en la Bolsa de Santiago, la primera emisión de este tipo por una empresa chilena en el mercado nacional.