Nuevo fiscal económico demandó a Municipalidad de Santiago para no pagar deuda por derechos de aseo
La acción judicial -iniciada en marzo pasado- apunta a extinguir un monto impago por casi 2,5 millones de pesos, argumentando que la deuda se encuentra prescrita.
En medio de un litigio judicial con la Municipalidad de Santiago se encuentra el abogado Mario Ybar, quien este lunes asumió como la máxima autoridad de la Fiscalía Nacional Económica (FNE), en calidad de subrogante, mientras se realiza la selección del jefe de servicio mediante el Sistema de Alta Dirección Pública.
Ybar -quien anteriormente se desempeñaba como subfiscal nacional, luego de más de quince años trabajando en el organismo- presentó una demanda en contra del municipio capitalino para solicitar que se extinga una deuda emanada por ese organismo en contra del abogado por $2.411.448, por concepto de no pago de los derechos de aseo domiciliario que correspondían a su propiedad ubicada en calle Fray Camilo Henríquez.
Un informe emanado desde la Municipalidad, en enero de este año, fijaba ese monto adeudado por no pago desde 1996 hasta 2012, lo que dio origen a la acción judicial de parte de la nueva autoridad de la FNE.
La defensa de Ybar, el abogado Rodrigo Soto, argumenta en el libelo que se trata de deudas que se encuentran prescritas en la actualidad, debido a que éstas vencen a los cinco años, y que su representado “se enteró de la existencia de dichas deudas por concepto de patente municipal cuyo monto incluye capital, multas, reajustes e intereses”.
“Se encuentran extinguidas por prescripción las acciones de la I. Municipalidad de Santiago para demandar el cobro de los derechos de aseo domiciliario en contra de mi representado”, dice el documento que consta en el Poder Judicial.
Desde la Municipalidad de Santiago, a través del abogado Aldo Tortorolo de la Dirección de Asesoría Jurídica, aceptaron la total de la demanda interpuesta, aunque hasta la fecha la acción no ha llegado a su fin. El 10 de julio pasado, la parte de mandarte no se presentó para la lectura de la sentencia.