Ministro de Salud asegura que algunos olores en Quintero y Puchuncaví “no implican intoxicación”
"El solo hecho que tenga un mal olor puede producir náuseas y vómitos, pero no implica una intoxicación", explicó.
“Hay que transmitir un mensaje de tranquilidad”, dijo el ministro de Salud, Emilio Santelices, sobre los reiterados episodios de contaminación que afecta a la población de Quintero y Puchuncaví.
Según la última medición, se registró un nivel de arsénico en el aire que supera 23 veces la norma europea. Pero el titular de Salud puso paños fríos a ese dato: “Afortunadamente, las partículas que se pueden inhalar finalmente terminan en las vías aéreas respiratorias superiores. El arsénico produce daño a las personas cuando está asociado a alimentos o al agua, es ahí donde se debe mantener el monitoreo”.
En conversación con Radio ADN, señaló que “lo que han mostrado los estudios es que los niveles que se encontraron de gases eran de bajo riesgo en la norma internacional”.
La presencia de agentes contaminantes se evidenció debido a los efectos que produjo en la salud de los habitantes de ambas zonas. Al respecto, Santelices aclaró que los síntomas encontrados se podrían producir por los llamados “olores ofensivos”, los que “producen efectos organolépticos, es decir, el solo hecho que tenga un mal olor puede producir náuseas y vómitos, pero no implica una intoxicación”.
En medio del agudo episodio de contaminación, una joven de 21 años denunció que tuvo un aborto, producto de los síntomas producidos por la nube tóxica.
A su juicio “cuando se analizan los distintos síntomas de intoxicaciones agudas de gran magnitud, uno puede llegar a tener condiciones severas. Por ejemplo,una intoxicación con arsénico determina daño multiórgano”, de todos modos el ministro acotó que “dadas las métricas objetivas que existen, la probabilidad de que aquí haya una relación de causalidad es baja”.