Fiscalía sigue los pasos a “red de amigos” de Raúl Schüler
El Juzgado de Garantía de Graneros determinó arresto domiciliario total y arraigo nacional contra el empresario.
El empresario Raúl Schüler, investigado por la receptación de piezas de arte, quedó con arresto domiciliario total. Juez dio 180 días para la investigación.
El Juzgado de Garantía de Graneros determinó arresto domiciliario total y arraigo nacional contra el empresario Raúl Schüler, luego de que se le incautaran 21 estatuas, dos cofres de plata y otros dos candelabros, considerados patrimonio nacional, en noviembre pasado.
A pesar de que el fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, había solicitado la prisión preventiva de Schüler por los cargos de receptación reiterada, infracción a la Ley de Monumentos Nacionales y a la de Ley de Armas, hoy el escenario cambió.
Esto, fundamentalmente, por el cambio de actitud de la defensa. Esta el primer día declaró que los antecedentes de la carpeta de investigación “eran falsos”, pero hoy presentó información de carácter importante para el Ministerio Público, lo que mitigó el peso de las cautelares.
“Estos antecedentes fueron analizados previamente y nos permiten realizar diligencias de investigación para poder ahondar más en el fenómeno y así perseguir penalmente a otras personas”, señaló el fiscal, quien agregó que “fue sorpresivo pasar de ‘soy inocente y no sabía nada’, a aceptar la segunda medida cautelar más gravosa del ordenamiento jurídico. En relación con eso, nos deja con muy buena posición en miras de un juicio oral”. Para ello, se determinó un plazo de 180 días para la investigación.
El abogado defensor, Carlos Cortés, aclaró que “no es un acuerdo” entre el Ministerio Público y la defensa. “Se entregaron antecedentes que están con secreto de investigación, la fiscalía los valoró como importantes, bajó su solicitud de medida cautelar y nosotros nos allanamos a la misma”.
Red de contactos
La información entregada por parte de la defensa del empresario permitiría, según el Ministerio Público, determinar la red de contactos que habría permitido la apropiación ilícita del patrimonio cultural, que Raúl Schüler habría adquirido durante un período de 13 años (2003 a 2016). El pasado 17, el empresario declaró que se abastecía de unos 15 proveedores de antigüedades, que no le entregaban documentación para legitimizar la propiedad y traslado de las obras.
“Si se hace una efectiva investigación, en este mercado se puede controlar de alguna manera el robo de arte que se realiza en nuestro país, porque el rol del receptador acá es distinto del de los espejos de auto, que siempre va a tener un comprador dispuesto a comprarlos”.
El empresario ha declarado dos veces frente a la Fiscalía de Alta Complejidad de O’Higgins, una de ellas en calidad de imputado. En ellas también ha detallado que las compras las hizo en Valparaíso, en el Barrio Franklin y en el Parque Los Reyes, en Santiago.
Cabe recordar que durante la primera audiencia, la fiscalía avaluó en más de $ 275 millones las reliquias que Schüler tenía en su poder y que el imputado “no pudo desconocer el origen robado de las mismas, toda vez que se ha declarado públicamente como coleccionista de arte y antigüedades”.
Además, se indicó que las piezas incautadas desde el exfundo Las Casas, en noviembre pasado, por la Brigada Investigadora de Delitos contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural de la PDI, estaban “faltas de mantención, fracturadas y oxidadas”.
