VIDEO | CNN Chile revisó una a una sus frases y dejó en evidencia las mentiras de Camila Flores en polémica entrevista
A días de que la diputada RN enfrentara las preguntas de Daniel Matamala, sus declaraciones continúan generando debate, por lo que se decidió chequearlas, dando cuenta de sus mentiras.
Las declaraciones que la diputada Camila Flores entregó en el programa 360º de CNN Chile continúan generando repercusiones, por lo que Nicolás Copano desmenuzó cada una de ellas para corroborarlas en su programa Cada Noche, dejando en evidencia sus mentiras.
“El Congreso apoyó el pronunciamiento militar”
A Daniel Matamala, la parlamentaria RN sostuvo que el poder legislativo “es quien previamente al pronunciamiento militar realiza un proyecto de acuerdo en donde se señala (…) las vulneraciones a la Carta Fundamental y a una serie de derechos. (Si bien) no estoy diciendo que (el Congreso) lo haya destituido (a Salvador Allende), sí apoyó el pronunciamiento militar de 1973”.
En ese sentido, Copano explica que efectivamente la oposición al gobierno de Allende tenía mayoría tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, lo que lo facultaba a “generar destituciones de funcionarios de gobierno como una forma de muñequeo de poder contra las decisiones que tomase el gobierno”.
En agosto de 1973, los diputados presentaron un proyecto de acuerdo sobre el estado de la República en el gobierno de Salvador Allende. En él se le plantea a los cuatro militares que integraban el Gabinete de Allende “sobre cuál lado de la vereda elegirían: si estar dentro del programa político de la Unidad Popular o actuarían en sus ministerios fuera de este programa”.
“La presencia de dichos señores Ministros en el Gobierno importaría un valioso servicio a la República. En caso contrario, comprometerían gravemente el carácter nacional y profesional de las Fuerzas Armadas y del Cuerpo de Carabineros”, consignaba el acuerdo parlamentario.
De esta manera, esta iniciativa era un llamado de atención a aquellos militares, lo que provocó finalmente que “tres de los cuatro generales salieron del gabinete y se acogieron a retiro”. Agregan, además, que “por ningún motivo ese proyecto de acuerdo implicó un llamado a que las Fuerzas Armadas intervinieran en el poder. Porque eso también habría sido una contravención al mismo artículo que los diputados habrían estado reclamando”.
“Entonces, la Cámara de Diputados en 1973 no apoyó una intervención militar, sino que solo les pidió tomar una postura a los cuatro militares que ocupaban el gabinete de Allende. Y tres de cuatro entregaron sus cargos tanto en el gobierno como en sus respectivas Fuerzas”, agregaron.
2. ¿Pinochet sabía de las violaciones a los Derechos Humanos?
En la misma entrevista, Flores indicó que “desgraciadamente, yo no tuve el privilegio de conversar con él (Pinochet). No tuve la oportunidad de compartir y comentar con él estos hechos (las violaciones a los Derechos Humanos). Porque créame que, si lo hubiese hecho, se lo contaría”.
Aquí Copano apunta a una falacia conocida como apelación a la ignorancia: el argumentum ad ignorantiam.
“Cuando la diputada señala no tener el ‘privilegio’ de poder preguntarle a Augusto Pinochet si violó o no los Derechos Humanos, dado que el dictador está muerto. Y lo que dice la diputada Flores es falso. No porque Pinochet esté muerto significa que no haya evidencia suficiente de la responsabilidad del dictador en las violaciones a los Derechos Humanos”, afirma el periodista.
En ese sentido, explica que “el testimonio de una persona no es prueba suficiente de que lo que esté diciendo sea verdad”. Segundo, “existen investigaciones judiciales y de inteligencia internacional que demuestran fehacientemente el rol de Pinochet como agente de terrorismo de Estado”.
3. La dictadura militar chilena no mató por pensar distinto
Camila Flores indicó en 360º de CNN Chile que “acá, lo que se vivió en nuestro país era un enfrentamiento entre civiles. A los otros (en otros países) se les mató simplemente por pensar distinto, donde eran civiles absolutamente indefensos”.
Aquí Copano apunta a que la congresista mezcla “dos cosas en este punto. Como se dice en lógica argumental, es una falacia non sequitur, es decir, el punto B no se sigue de lo planteado en un punto A”.
“Cuando dice que hubo ‘enfrentamientos entre civiles’, ella se refiere a los hechos sucedidos anteriormente al golpe de Estado. Las duras peleas políticas ocurridas antes de septiembre de 1973 ciertamente fueron enfrentamientos entre civiles. Pero aun concediendo que efectivamente existieron grupos armados afines a la Unidad Popular, dichas organizaciones armadas no equivalían en poderío militar y estratégico a los recursos de las Fuerzas Armadas y de Orden”, agrega.
Es por eso que una vez que los militares toman el poder deja de ser un enfrentamiento entre ‘civiles’, sino que “la situación no es entre pares de diferente signo político, sino que una confrontación asimétrica entre unos escudados detrás del monopolio de las armas y otros víctimas del monopolio de las armas”.
“Y, en esa asimetría, sí se mató gente por pensar distinto. Aparte de ello, también hubo relegaciones, torturas, exilio y desapariciones; no solamente a quienes tuvieran ideas comunistas, sino que a cualquiera que tuviese ideas progresistas”, acotó.
De esta manera, explicó que “como se dijo anteriormente, este dicho de Camila Flores mezcla dos cosas. Busca hacer parte de una misma relación los enfrentamientos entre civiles previamente a 1973 (estableciendo que estos continuaron de la misma forma con posterioridad al golpe de Estado) y, como supuesta consecuencia de lo anterior, ella afirma que la dictadura no mató personas por pensar distinto”.