Balance de los primeros 80 días de Bolsonaro: 92 fake news y 6 ministros en causas judiciales
Desde la Fundación Ciudadanía Inteligente manifestaron que "es impresentable que se reciba en Chile con brazos abiertos a quien usa el discurso de odio e intolerancia como base".
La Fundación Ciudadanía Inteligente, que cuenta con oficinas en Rio de Janeiro, además de su sede central en Santiago, hizo un recuento en cifras de la gestión del Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, durante sus primeros 80 días con motivo de su visita de Chile para asistir a la cumbre del Prosur.
Según datos recopilados por la organización sin fines de lucro, el jefe de Estado de Brasil en sus primeros 80 días ha dado 92 noticias falsas, seis ministros de Estado están envueltos en causas judiciales y uno de ellos, Gustavo Bebbiano, ex secretario general de la Presidencia, ya fue destituido en menos de dos meses por financiamiento ilegal de campañas.
Además, desde que Bolsonaro asumió hasta el 4 de febrero se han registrado 126 femicidios y el Gobierno extendió la vigencia de los permisos de armas de 5 a 10 años. Respecto de la constitución del gabinete: de las 22 personas que lo componen sólo dos son mujeres.
Asimismo, con el nombramiento del general Floriano Peixoto para la Secretaría General de la Presidencia en lugar de Gustavo Bebianno, el gobierno de Bolsonaro pasó a tener ocho militares al mando de ministerios.
La coordinadora regional en Brasil de la Fundación Ciudadanía Inteligente, Ana Carolina Lourenco, dijo que “el gobierno de Bolsonaro ha realizado declaraciones homofóbicas, racistas, machistas, entre otras, y promovido políticas que ponen en riesgo el espacio cívico, y la misma democracia. Es impresentable que se reciba en Chile con brazos abiertos a quien usa el discurso de odio e intolerancia como base. No podemos legitimar su visita”.
Para la organización Ciudadanía Inteligente, “es de suma importancia no normalizar el discurso de odio y éste debe ser condenado tanto en Chile como en todo el mundo“.
Además, la ONG señaló que “para recuperar la salud de la democracia es fundamental promover el diálogo ciudadano, la formación cívica digital y apoyar a los liderazgos políticos que defienden los derechos humanos“.
“El impacto de depositar el liderazgo de los procesos regionales en las manos de jefes de Estado que apoyan abiertamente una agenda en contra de los derechos humanos es un riesgo mucho más allá del impacto de Brasil. Es una amenaza a la democracia regional“, concluyó.
