Moreno sobre Essal: “Pagar compensaciones no tiene gracia”
El ministro de Obras Públicas criticó fuertemente a la empresa Essal por la crisis del agua potable que se produjo por 10 días en Osorno.
El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, criticó fuertemente a la empresa Essal por la crisis del agua potable que se produjo por 10 días en Osorno.
En conversación con el programa Mesa Central de Canal 13, el ministro señaló que lo que ha vivida la ciudadanía de Osorno esta semana es “extremadamente grave. Vivir sin agua, a parte de las complicaciones diarias de tener que acarrear bidones, tiene riegos de salud extraordinariamente altos, que afortunadamente hemos podido mitigar”.
Por eso, según Moreno la molestia de la gente “es muy comprensible”, así como la desconfianza de la gente. En cuanto a las multas a la empresa, tras las declaraciones del presidente de la sanitaria Essal, Guillermo Pickering, que sostuvo que se pagarían las compensaciones, Moreno señaló que “pagar las compensaciones no tiene gracia alguna, eso está establecido por ley”.
Sobre los cambios en la legislación, el ministro explicó que “el tema de la regulación de las sanitarias es un tema en el cual hemos estado trabajando antes de esto. De hecho yo había estado en la comisión de Obras Públicas del Senado, donde hay un proyecto para modificar toda la legislación de las sanitarias”, sostuvo, admitiendo además que “la ley muestra falencias en las capacidades de fiscalización”.
Una de las lecciones de la emergencia en Osorno, para Moreno, es que “tenemos que asegurar el servicio de agua potable a la población, aún en situaciones extremas. Ya sea de contaminación, o fallas en las plantas y el abastecimiento. Eliminando lo más posible la vulnerabilidad que tenemos”.
En la misma línea, sostuvo que en la planta de Osorno, “más allá del error humano, hay una fragilidad inmensa. Por faltas de protocolo, de capacidades tanto humanas como materiales, que no se condice con la responsabilidad de tener que entregarle agua todos los días a 200 mil personas. La empresa no está a la atura del desafío que se requiere para dar agua a la ciudad”.
El titular del MOP agregó que “una empresa como esta, y cualquiera que entrega un servicio público, tiene que entender una cosa que es vital. Aquí la rentabilidad es de largo plazo, porque se basa en una sola cosa: la confianza de las personas. Esta empresa, el problema que tiene, no es legal, sino que ha perdido la confianza de la gente a la que tiene que atender”.