La emotiva historia de Yerko, el joven de 18 años baleado en Puente Alto

Como Yerko Riveros, de 18 años, fue identificada la tercera víctima de la fatal balacera que se registró en un almacén de la población Carol Urzúa de Puente Alto.

“Yo crié a mi niño. Era un cabro tranquilo. Nunca estuvo endrogas, no tomaba, no fumab,. Ni polola tenía. Como soy celosa, siempre le decía que que no quería mujeres en mi casa. Él todavía dormía conmigo: era mi guaterito”, relató a LUN la abuela del joven, Margarita Aguilera (73).

Según la mujer, ese día el joven le dijo que iría al almacén del frente a jugar a las máquinas, además de querer comprarse unas galletas y una bebida chica. “Salió, se quedó jugando y no volvió más“, recordó su abuela.

“Cuando sentimos los balazos en mi casa, mi familia se tiró al suelo, pero yo me quedé parada. Luego llegó un niño a la puerta y gritó para adentro: ‘¡Aló! ¡Aló! ¡El Yerko!’. El papá, mi hijo, salió desesperado para el negocio”, continuó Margarita en su relato.

Yerko, que ese jueves estuvo todo con su madre confeccionando volanines para venderlos, solía ir a las máquinas. El joven, que había terminado el colegio con un título técnico en gastronomía, era el apoyo de su abuela: “Siempre me decía ‘Lela, cuando encuentre pega y gane buen sueldo, te voy a sacar de aquí’. ¿Y ahora qué? Me va a sacar para ir al cementerio“.