La reveladora relación entre sueldo mínimo y el pasaje en Metro
Según explicó el especialista Daniel Arancibia, pese a que el sueldo mínimo aumentó al doble en los últimos doce años, el valor del pasaje en Metro creció a la par.
La reciente alza que sufrió el transporte público en nuestro país -un pasaje en Metro cuesta $830 en hora punta- ha generado que durante esta semana más de mil estudiantes salten las barreras del tren subterráneo.
En gran medida, el descontento ciudadano obedece a que durante los últimos 12 años el precio del pasaje en Metro creció a la par del sueldo mínimo.
Según contó a EL DÍNAMO el especialista en transporte y urbanista, Daniel Arancibia, el sueldo mínimo de los chilenos subió 2,1. Mientras que desde 2007 a la fecha el costo de circular en Metro durante el horario punta creció 2.0 veces.
“Los trabajadores ganan más, pero el incremento del costo de vida deja a muchos donde mismo”, dijo el experto titulado en la Universidad de Toronto, Canadá.
Además aseguró que “en periodos críticos -entre 2011 y 2012- el aumento de las tarifas fue aún más grande que el aumento del sueldo mínimo”, esto se vio reflejado en que “la proporción del sueldo mínimo que una persona tenía que dedicar a transporte (asumiendo 50 viajes mensuales) alcanzó más del 18%“.
¿Cuánto del sueldo mínimo se gasta en Metro?
Según las cifras que obtuvo Arancibia a través del cruce de datos, durante este año -y considerando el nuevo valor del Metro- los chilenos que ganan el mínimo se gastan un 13,8% de su salario en el tren subterráneo (considerando dos viajes en hora punta al día).
“Afortunadamente ahora la proporción está por debajo del promedio local, en uno de sus niveles más bajos desde que comenzó la integración tarifaria entre bus y metro en 2007. Esto se debe principalmente al aumento sostenido del sueldo mínimo en los últimos años”, afirmó el experto.
Sin embargo, al comparar la situación de Chile con la de otros países y ciudades del mundo, esta métrica no es nada favorable. Según dijo Arancibia, “a diferencias de las naciones desarrolladas, en nuestro país no existe la opción de descuentos por hacer un abono mensual, o por el número de viajes”.
Además, insistió en que “la percepción del costo para los chilenos está alterada”. “A diferencia de Toronto, por ejemplo, en Santiago a las horas de mayor congestión muchos trabajadores están pagando una tarifa elevada para un servicio extremadamente incómodo y estresante”.