FNE recomienda reforma al mercado de medicamentos para bajar en 40% sus precios
De acuerdo al documento, la reducción de los valores se lograría con catorce medidas, como por ejemplo, introducir medicamentos bioequivalentes en el mercado y obligar a los médicos para que receten remedios sin marca.
A través de un estudio, la Fiscalía Nacional Económica realizó una serie de recomendaciones sobre el precio de los medicamentos en el país, reformas que de ser consideradas por el Gobierno, podrían bajar en hasta un 40%.
“Los medicamentos son un bien de primera necesidad y es urgente adoptar medidas que permitan a la población acceder a ellos a un menor precio. Eso se logra mediante una regulación que promueva más competencia en este mercado”, indicó el fiscal nacional económico Ricardo Riesco.
De acuerdo al documento, la reducción de los precios se lograría con catorce medidas, como por ejemplo, introducir medicamentos bioequivalentes en el mercado, obligar a los médicos para que receten medicamentos sin marca, exigir a las farmacias dispensar los remedios más baratos y que el Estado compre medicamentos de forma transparente.
Con ello, la FNE estimó de forma conservadora que “se puede lograr un ahorro de entre 20% y 40% en promedio” en el precio de los medicamentos con alternativas bioequivalentes. Esto significaría un impacto anual de hasta US$ 380 para el mercado de los medicamentos comercializados en farmacias.
El mercado de los medicamentos
Sin embargo, el informe de la Fiscalía Nacional Económica, además, reveló que la industria de los medicamentos en nuestro país opera con la misma lógica que los mercados de consumo masivo.
“Actualmente, el mercado de los medicamentos opera en Chile de la misma forma que cualquier otro mercado de consumo masivo en que se compite por marcas, como los automóviles, el vestuario o los celulares, por ejemplo, y esto se debe a que la política de bioequivalencia no ha sido efectiva”, complementó Riesco.
Afirmación que hace el fiscal, pues, “también se detectó que 80% de los medicamentos inscritos en Chile aún no tienen alternativas bioequivalentes y que los laboratorios realizan superiores a US$ 200 millones al año para promover sus marcas entre los médicos”.