José Ramón Valente: “A la gente le da vergüenza decirlo: el modelo económico chileno estaba funcionando bien”
En relación al proceso constituyente, declara que esto muestra la desconexión entre los políticos y la ciudadanía: "Cuando uno le pregunta a la gente cuáles son sus prioridades, son más bien pensiones, salud, trato justo, salarios, empleo y la Constitución está bastante atrás".
El exministro de Economía en el segundo mandato de Sebastián Piñera, José Ramón Valente, se refirió a la actual situación que está viviendo en Chile tras el estallido social, ad portas del plebiscito del 26 de abril.
En conversación con La Tercera, detalló su vida actual de regreso a Econsult desde su salida hace 7 meses del gobierno actual y la crisis que está sobrellevando el gobierno actualmente.
Asimismo, Valente señala que el programa actual a comparación del inicial es totalmente distinto, asegurando que después de octubre este debió cambiar según las exigencias de las demandas sociales de la ciudadanía: “Nosotros entramos con una épica muy clara que era transformar a Chile en la primera nación de Latinoamérica capaz de tener una calidad de vida de país desarrollado (…) Está enfocado en fortalecer las instituciones, reducir la violencia, al proceso constituyente; por lo tanto tiene un énfasis distinto”.
En la misma línea, confiesa que tuvieron una “debilidad institucional” para enfrentar el estallido social que tuvo su inicio el pasado 18 de octubre del 2019. No obstante, condena la violencia que se ha vivido en las calles de nuestro país y que la exigencia de demandas sociales a través de la destrucción no es “legítimo“.
“En muchas partes se producen manifestaciones, pero el apoyo a la violencia o la tolerancia que hubo y, sobre todo, en una parte de la clase política, es algo inentendible“, indica.
El economista defiende el modelo económico del país, argumentando que “ha dado grandes beneficios a los chilenos, entre ellos la reducción de la pobreza y la desigualdad, un significativo aumento del bienestar material, mayor acceso a la educación y puede seguir dándolos”, asegurando que los beneficios del desarrollo ha llegado a todos los chilenos, sin segregación.
“El modelo es mejorable. Todavía hay algunos privilegios, eventos de monopolio, no somos un país perfecto, pero somos un mejor país de lo que éramos hace 30, 20 o 10 años. A la gente le da vergüenza decirlo: el modelo de desarrollo de la economía chilena estaba funcionando bien”.
Sobre la crisis, el exministro de Economía señala que pondría como prioridad fortalecer las instituciones de Carabineros y el Ministerio Público, como también limitar la reelección de parlamentarios: “Un sistema político en que los representantes del pueblo destinan más tiempo y esfuerzo a mantenerse en el poder, más que a hacer buenas políticas públicas, termina deslegitimándolo la democracia“.
En relación al proceso constituyente, declara que esto muestra la desconexión entre la política y la ciudadanía.
“Hoy le estamos dedicando un esfuerzo muy grande al tema de que se necesita una nueva Constitución, pero cuando uno le pregunta a la gente cuáles son sus prioridades, son más bien pensiones, salud, trato justo, salarios, empleo y la Constitución está bastante atrás. Sin embargo, el mundo político se las arregló para hacer de este tema el más relevante”, puntualizó.