PIB: economía chilena esquiva la recesión y crece 0,4% en el primer trimestre de 2020
La expansión del PIB se produjo en medio de medidas decretadas por la autoridad sanitaria o las asumidas de forma voluntaria por la población para evitar la expansión del COVID-19 a partir de marzo.
El Banco Central (BC) informó este lunes que el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció un 0,4% durante el primer trimestre de 2020, esquivando los efectos negativos del coronavirus que se preveían en la economía chilena.
En su informe, la entidad detalló que el PIB logró expandirse con respecto a igual periodo del año pasado en medio de las medidas decretadas por la autoridad sanitaria o las asumidas de forma voluntaria por la población para evitar la expansión del COVID-19 a partir de marzo.
Según el Banco Central, dichas determinaciones impactaron en forma significativa en los rubros de educación, comercio, transporte y restaurantes y hoteles, entre otras.
Asimismo, hubo una recuperación de actividades con resultados negativos en el cuarto trimestre de 2019, lo que fueron impactados por la crisis social de octubre. Las mayores contribuciones fueron servicios personales, comercio y servicios empresariales.
De esta forma, la economía chilena logró evitar la recesión técnica, es decir, dos períodos consecutivos sin crecimiento.
Cabe recordar que en el cuarto trimestre de 2019, la economía chilena cayó en 2,1%, anotando su peor desempeño desde el periodo abril-junio de 2009.
En el Informe de Política Monetaria (IPoM) de marzo de 2020, el BC previó una recesión en Chile en 2020.
“La propagación del COVID-19 ha impuesto un escenario inusual, en el que las decisiones respecto de la salud pública, necesarias para evitar costos mayores en términos de vidas humanas, inciden significativamente sobre la actividad social y económica”, expresó el Banco Central en su informe.
En este contexto, se señaló que tendrán efectos importantes sobre la actividad, el mercado laboral y la inflación, y que, más allá de que los últimos Imacec dieron cuenta de una recuperación más rápida que la anticipada, el mercado laboral se ha deteriorado y las medidas sanitarias inciden con mayor intensidad sobre sectores que ya se habían visto afectados por la crisis social.