Cómo y por qué Chile corrigió conteo fallecidos por Covid-19
El nuevo registro se construye con la información del día anterior y se informa al día siguiente. Esto quiere decir que existe un desfase de 36 a 48 horas de la información que se entrega con la nueva forma de conteo. A la OMS, en tanto, se entrega un informe con casos aún no confirmados.
Las cifras preocupan. El viernes, Chile registró uno de sus días más complejos en lo que va de la pandemia de coronavirus, con un récord de 222 personas inscritas. Sin embargo desde el Ministerio de Salud reiteraron que no es la cifra oficial de decesos en un día, sino el número de registros con causa de muerte asociada a COVID-19.
La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza -quien volvió a sus labores presenciales tras cumplir su cuarentena- se refirió este sábado al asunto, indicando que la metodología vigente en Chile solo incluye a las víctimas fatales con un examen PCR positivo, tal como lo indica la OMS.
Agregó que el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS), dependiente del Minal, informa semanalmente a la OMS los casos confirmados, sospechosos y probables sin diagnóstico confirmado para mantener la vigilancia epidemiológica. De acuerdo procedimiento, si la persona da negativo al PCR, se quita de la lista.
La respuesta de Daza se da ante las dudas tras un reportaje de Ciper que aseguró que el Minsal informó una cifra superior a los 5 mil fallecidos por COVID-19, por sobre los números oficiales publicados por la autoridad. Esto responde a que el DEIS agrega a los muertos con examen PCR positivo, además a aquellos clasificados como sospechosos o con posibilidad de haber contraído COVID-19.
El viernes, Fernando Leanes, representante de la OPS/OMS en Chile, aseguró que desde la OMS no hay reparos a las cifras entregadas por el Minsal. “¿Se está contando bien en Chile? Sí, porque lo que se está pidiendo, lo que tiene más urgencia para la OMS, son los casos diagnosticados”, sostuvo Leanes en Radio Cooperativa, enfatizando en que “en el tema del registro y la comunicación a la OMS/OPS está funcionando sin que se haya hecho ninguna observación”.
Primeros cuestionamientos
El 14 de mayo, la periodista Alejandra Matus publicó un documento sobre las muertes por enfermedades respiratorias desde el primer caso de COVID-19 en Chile, datos entregados por el Registro Civil a una solicitud de Transparencia del abogado Jorge Álvarez.
Según denunciaba, entre el 3 de marzo y el 29 de abril 2020, en Chile murieron 4.201 personas por enfermedad respiratoria. A esa fecha, Minsal registraba 209 fallecidos por COVID-19.
La periodista agregó que la cifra representa un 20% sobre los fallecimientos totales reportadas entre marzo y abril de 2020.
Al día siguiente, el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, explicó que “aquí está incluido una persona que tenía asma bronquial y murió en un accidente de tránsito; que tenía una enfermedad bronquial obstructiva, pero murió de un infarto al corazón. Lo importante es la causa de muerte, y ese trabajo lo hace el Departamento de Epidemiología para la Información Sanitaria (DEIS)”.
Según el secretario de Estado, al analizar los datos por causa de muerte, hay un alza real del 8% en decesos por enfermedades respiratorias al comparar el periodo marzo-abril de 2019, desmintiendo la insinuación de Matus sobre cifras ocultadas por el Minsal.
Previamente, en entrevista con Radio Duna, el ministro de Salud había dicho que “no tengo información de cómo el Registro Civil llegó al resultado que informó a través de esta pregunta de Transparencia. Pero la base que usa el Registro Civil, la causa, se hace desde el Ministerio de Salud”.
Días antes, el 6 de mayo, el Minsal envió un oficio a los centros médicos, indicando que a partir de ese momento se consideraba como fallecidos por COVID-19 a todo paciente que a juicio de su médico “muere producto de un cuadro clínico compatible con los presentados en casos de coronavirus y que cuenten con una prueba específica de PCR positiva o que estén a la espera del resultado”.
Esto ayudaría a establecer cuántas muertes se producen por coronavirus al día.
La encuesta
El 3 de junio, el Ministerio de Salud comenzó a aplicar una nueva forma de contabilizar los fallecidos por COVID-19, metodología que aumentó la cifra de muertos pese algunas víctimas no contaban con el examen de PCR. Pero las dudas sobre cuántas muertes por coronavirus había en Chile persistieron.
De acuerdo explicó la autoridad de Salud, todas las personas que en su certificado de defunción diga COVID-19, sea o no la causa principal de muerte e incluso si el PCR de confirmación esté pendiente, serían consideradas entre los fallecidos. Si posteriormente el examen sale negativo, se retira a la persona de la lista.
Ese mismo día, un estudio de Espacio Público indicó que las cifras de fallecidos no se ajustaban al escenario actual, ya que entre el 2 de abril y el 27 de mayo el número de fallecimientos atribuibles a COVID-19 era de 1.537, por sobre a los 825 reportados por la autoridad. Esto -según explicaron- responde a no se consideraban las defunciones en las que no se alcanza a realizar un examen PCR antes del deceso.
Ante los cuestionamientos, Mañalich indicó que el estudio de Espacio Público “no se ajusta a la realidad” y “calculado como corresponde”, ajustado por población, el exceso de fallecidos daba 811, mientras que el Minsal había informado 825 decesos.
Pero en menos de 24 horas de sus declaraciones, el ministro de Salud validó el estudio de Espacio Público tras conversar telefónicamente con el director del centro de estudios, Eduardo Engel. “Me explicó la metodología de su estudio y es una metodología válida. Ellos proyectan variables históricas de número de fallecidos por edad, población, se encuentran con un exceso del orden de 700 personas”, indicó el titular del Minsal.
Fue el 7 de junio cuando el ministro Jaime Mañalich anunció oficialmente que se ajustará el total de muertes por la enfermedad ante un cambio en la metodología. Según explicó, ese día sumaron 653 personas a las cifra de muertos, acumulado 2.190 fallecidos de fallecidos por la pandemia.
Salto en las cifras
La nueva metodología debutó con un gran salto en las cifras, reportando 19 fallecidos diarios el martes y al día siguiente 192.
La autoridad sanitaria explicó que, hasta el 2 de junio, el reporte diario de fallecidos COVID-19 se realizaba en base a la información que se recibía, principalmente, de los hospitales y de las Secretarías Regionales Ministeriales (seremis) a través del certificado de defunción.
Sin embargo, la evaluación de este método demostró la necesidad de perfeccionamiento, a lo que el Minsal decidió cambio de la metodología, dejando como fuente primaria la base de datos del Registro Civil.
Esta forma de contabilizar por fallecidos por causas vinculables a COVID-19 comenzó a implementarse desde el domingo 7 de junio.
Asimismo, las autoridades comenzaron a modificar los números anteriores, reportando las siguientes cifras a la noche del 12 de junio sujetas a revisión, determinando el número real de cuántas muertes hay por coronavirus diariamente:
Según el Minsal, para determinar cuántas muertes existen por coronavirus, todos los días se realiza un cruce de información entre la base de datos de los exámenes de coronavirus (laboratorios) y la base de datos del Registro Civil. Ese cruce da forma al “Registro Fallecidos COVID-19″.
El registro se construye con la información del día anterior y se informa al día siguiente. Esto quiere decir que la información que se recibe el domingo en la mañana correspondiente al día sábado se procesa el domingo y se entrega públicamente el lunes. Por lo tanto, existe un desfase de 36 a 48 horas de la información que se entrega.
Sin embargo, pareciera que aún no hay comunicación en los distintos organismos. Jorge Álvarez, director del Registro Civil, afirmó ante la comisión investigadora por la cifra de fallecidos por COVID-19 que “nosotros no conocemos la metodología ni los cambios en la metodología. No estamos en esa materia” y que el organismo solo lleva “registros administrativos” y no “estadísticas paralelas”.
“Nosotros entregamos al Minsal todos los inscripciones de defunción ocurridas en Chile y no hacemos ninguna distinción de ninguna especie”, agregó Álvarez.
Más cambios
Si bien respaldó la nueva metodología, el ministro de Ciencias, Andrés Couve, reconoció que podrían existir más cambios a futuro ya que “es un sistema de información que está en construcción“.
“Hay que hacerlo porque la información va creciendo, hay que ajustar metodologías permanentemente y tenemos que tener esta actitud de que es dinámico”, agregó Couve.
De acuerdo al titular de Ciencias, el sistema actualmente implementado en Chile para determinar cuántas muertes por coronavirus hay diariamente ya ha sido usado en algunos países desarrollados y “permite a cualquier persona revisar los números y sabemos exactamente la base de datos donde esto se origina”.
Couve reconoció que el nuevo sistema de conteo de fallecidos no es el aplicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero sí es usado por otras naciones de la Unión Europea, las que tienen más experiencia tras haber pasado el peak de la pandemia.
Previamente, el representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) en Chile, Fernando Leanes, afirmó que la nueva manera de contar a los fallecidos “puede tener razón”, pero que “ha generado confusión”.