El camino que le queda al proyecto de retiro de fondos de pensiones en el Congreso
Luego que la iniciativa fuera aprobada en general por la Cámara de Diputados deberá pasar por comisiones y por el Senado, donde podría ser rechazada y sujeta a cambios.
El proyecto de retiro parcial de fondos desde las AFP por la crisis del coronavirus fue aprobado en general por la sala de la Cámara de Diputados, cumpliendo así el primero de varios pasos que quedan pendientes en el Congreso Nacional.
Es que a pesar que muchos celebraron la votación de este miércoles como si la iniciativa estuviese lista para ser ley inmediata, aún quedan algunos trámites, los que se asoman complejos frente a las diversas visiones existentes sobre el giro del 10% de los montos previsionales.
El camino que le queda al proyecto en el Poder Legislativo es el siguiente:
Comisión de Constitución de la Cámara
Este jueves a las 17 horas la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados volverá a revisar lo aprobado en la sala. Aquello ocurre porque lo único que se votó fue la iniciativa en general y no en particular, debido a que fue sujeta a algunas indicaciones que deberán ser revisadas.
Con este paso realizado, el retiro de fondos pasará nuevamente a la sala para ser votado por los 155 diputados. De ser aprobado será directamente despachado al Senado.
La revisión del Senado
La Cámara Alta recibirá el proyecto y lo pasará a la Comisión de Constitución. Si el proyecto sufre modificaciones en esa instancia pasará a la sala de senadores y luego a un tercer trámite legislativo a la Cámara Baja. Recién allí el proyecto podría quedar en condiciones de ser promulgado.
Pero también está la posibilidad de que el Senado modifique el proyecto en varios aspectos y que los diputados no aprueben estos cambios. Con estas diferencias se debería establecer una comisión mixta.
La posible comisión mixta
Esta instancia, compuesta por diputados y senadores, debería llegar a un acuerdo para sacar adelante el retiro de fondos en el Congreso con todas las modificaciones propuestas en su tramitación. De no ser así, la Cámara Baja -con la petición del Presidente de la República- puede insistir con el proyecto original. Si éste se aprueba, debería ir otra vez al Senado, el que necesitaría un voto de 2/3 para rechazar. Pasando este obstáculo el trámite seguiría con su curso normal hasta un total despacho.
Todo este avance quedaría sujeto a la presentación de un eventual veto de parte del Poder Ejecutivo, el que deberá ser votado por los mismos congresistas.