Las diferencias y coincidencias de Jadue con Lavín ante una nueva Constitución
Los alcaldes de Las Condes y Recoleta, respectivamente, debatieron en Tolerancia Cero lo que mantendrían, sacarían y agregarían en una nueva Constitución.
Joaquín Lavín y Daniel Jadue fueron los invitados de este domingo en Tolerancia Cero, en una edición especial por el plebiscito constitucional que se desarrolló y que registró un histórico triunfo del Apruebo por una nueva Constitución.
En medio de la conversación, los panelistas sometieron a los alcaldes de Las Condes y Recoleta, respectivamente, respecto a que cosas sacarían, mantendrían o agregarían en una futura nueva Carta Magna.
Primero fue la independencia del Banco Central, algo que Lavín sostuvo que “es absolutamente necesaria”, mientras que Jadue apostó por una “una independencia relativa”, que quiere decir “darle más atribuciones a objetivos que tengan que ver, por ejemplo, con el desempleo, ir más allá de una política monetaria”.
Sobre la protección del que está por nacer, el militante UDI aseguró que lo mantendría en la Constitución, mientras que el militante del PC iría por el aborto libre.
En cuanto al agua, tanto Joaquín Lavín como Daniel Jadue coincidieron en que el agua debe ser un “bien nacional de uso público”, mientras que en cuanto a salud, también se alinearon a que hay que generar “una salud pública buena para todos” y universal.
En cuanto al rol que cumplen las Fuerzas Armadas, el primero aseguró que “lo dejaría como está en la Constitución”, mientras que el segundo señaló que “lo cambio, no son garantes para mí de nada”.
Respecto a si el concepto de propiedad debiera mantenerse como está en la actual Constitución, Lavín expresó que “es esencial” y que “es muy importante y hay que mantenerla”, mientras que Jadue cree que hay que “subordinarla al bien común”.
Siguiendo con este “pimponeo” en Tolerancia Cero, a Lavín y Jadue se les consultó por los derechos sociales en la nueva Constitución. El primero manifestó que “por supuesto que sí, tienen que estar escritos, garantizados” y que hay que traducirlos en “buenas políticas públicas. El segundo en tanto, sostuvo que “deben estar escritos, garantizados y con mandatos específicos para los distintos poderes del Estado”.