Los riesgos sanitarios de las masivas fiestas clandestinas en pandemia
Los vecinos y las autoridades comunales se encuentran en alerta por la situación que se repite sin falta durante los fines de semana.
Preocupación causaron las imágenes de las masivas fiestas clandestinas que se llevan a cabo en la Plaza Brasil, en la comuna de Santiago, donde las personas fueron captadas infringiendo las medidas sanitarias impuestas por la pandemia del coronavirus.
En los registros, que fueron viralizados en redes sociales, se ve a la mayoría de los asistentes sin mascarillas y sin respetar la distancia social mínima de dos metros. Todo esto, sumado a que infringen otro tipo de leyes al estar consumiendo alcohol en la vía pública y no respetar el toque de queda que rige a nivel nacional.
De acuerdo a los datos proporcionados por Carabineros, durante la última semana – desde el 26 de octubre al 1 de noviembre- se registraron 154 eventos no autorizados que terminaron con 1.514 personas detenidas. Del total de eventos, 88 correspondían a fiestas clandestinas.
Más allá de las cifras, uno de los puntos más preocupantes para el académico de Salud Pública de la Usach, Claudio Castillo, es el riesgo sanitario al que se exponen las personas y la irresponsabilidad que representan este tipo de acciones que podrían seguir aumentando los contagiados de COVID-19 que se registran a nivel nacional.
Incluso, el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, aseguró que estas cuestionadas fiestas son parte de los motivos por los que la comuna no avanza a la fase 4 del plan de desconfinamiento del Gobierno.
Todo esto, se vuelve más preocupante al considerar que se acerca la temporada en la que se elevan las temperaturas, y con ellas las intenciones de las personas de disfrutar el buen clima para asistir a estas masivas fiestas.
Una situación que no solo causa alerta en nuestro país, ya que en países europeos también se han registrado fiestas que han provocado rebrotes y motivado a que se activen nuevamente los protocolos de confinamiento, las restricciones de funcionamiento o cierre de locales comerciales y bares ante el riesgo de contagios.
¡Alerta , fiesteros irresponsables!
El académico Claudio Castillo explicó a EL DÍNAMO que existe evidencia científica que demuestra que la transmisión del coronavirus causante del COVID-19 es de persona a persona por medio de los distintos fluidos o secreciones corporales, como la saliva.
Ante dicha situación, el asistir a estas fiestas masivas constituye un riesgo importante, ya que en dichas concentraciones suelen ocurrir situaciones que violan cualquier protocolo sanitario, como compartir vasos, cigarrillos y otros elementos que transitan sin ninguna precaución entre las manos y bocas de los fiesteros.
“Participar de una fiesta o de una actividad, por ejemplo, en un espacio cerrado, es de mayor riesgo. Generalmente en las fiestas que se realizan en estos espacios no se permite mantener la distancia física, donde además se comparten hasta cigarrillos”, sostiene el médico.
Castillo argumenta que como riesgo adicional también está que los fumadores deben quitarse la mascarilla para consumirlo, lo que “genera aerosoles cuando se expulsa el humo del cigarro”.
Sin embargo, el consumo de tabaco no es el único problema, ya que las personas que consumen alcohol en estas reuniones suelen sufrir una disminución de la “percepción del riesgo”.
“Siempre va a ser recomendable estar al aire libre, pero manteniendo la distancia con las personas que no son de nuestro círculo cercano, evitando incrementar las posibilidades de contagio”, concluyó el profesional.
Tras la llegada de la pandemia, se decidió endurecer las sanciones para quienes infrinjan las medidas sanitarias, llegando a condenas que van desde 61 días hasta 3 años de cárcel, mientras que las multas son entre 6 y 200 UTM ($300 mil a $10 millones).
El endurecimiento de sanciones y los riesgos sanitarios parece que tener gran impacto en parte de la población, que en su mayoría acumula más de una detención por delitos en contra de la salud pública. Incluso, solo en la última semana se registraron 4.327 personas detenidas por dichos ilícitos, según datos proporcionados por Carabineros.