A 10 años del Plan “Mapocho Urbano Limpio”: Sus grandes beneficios y los proyectos venideros

Este 2020, Aguas Andinas celebra 10 años desde que concretó el Plan “Mapocho Urbano Limpio”, el que consideró un gran trabajo de ingeniería que permitió la descontaminación del principal afluente capitalino, terminando con la descarga de aguas servidas. Esto ha traído beneficios tanto sanitarios, como ciudadanos y de un importante desarrollo en el ámbito de la biodiversidad.

Hace una década, en el Río Mapocho existían 21 puntos de descargas de aguas servidas provenientes de 10 de las 16 comunas que recorre el torrente. Para acabar con esa contaminación, la principal compañía sanitaria del país construyó un colector subterráneo en paralelo al río que considera una extensión de casi 30 km desde Las Condes hasta las plantas de la Biofactoría Gran Santiago, donde se canalizan las aguas servidas, son regeneradas y luego devueltas al río.

Principales beneficios

Con el Plan “Mapocho Urbano limpio” Santiago se ha convertido en la primera capital de América Latina en contar con 100% de cobertura de agua potable en zonas urbanas, alcantarillado y tratamiento de aguas servidas. Además, lo hizo en el tiempo récord de 12 años, considerando que otros países desarrollados han tardado entre 30 y 40 años en alcanzar esa meta.

Otro logro es que con la calidad del agua ha permitido la vida de nuevas especies de peces e insectos que son bioindicadores de una mejor salud del río. En 2018, el Centro de Ecología Aplicada (CEA) descubrió que el bagre chico y el pejerrey aparecieron en las aguas del Mapocho, y que la gambusia, o pez mosquito, la que fue introducida para evaluar su adaptación, no tuvo problemas y sobrevivió. Además, unas 39 especies, entre aves, mamíferos y reptiles también llegaron para quedarse.

Un beneficio que ha traído la descontaminación del Mapocho es la recuperación de espacios urbanos para la ciudadanía, ya que en su ribera se han realizado diversas actividades como corridas deportivas, murales y ciclovías. Destaca en este punto la creación del primer y único parque fluvial urbano al incorporar brazos del caudal al Parque de la Familia en Quinta Normal.

Se suman a estos saldos positivos la eliminación de los malos olores provenientes de la corriente que afectaba no tan solo a los transeúntes, sino que también a los negocios aledaños al río, como el Mercado Tirso de Molina o el Mercado Central.

Adicionalmente, se menciona el rol clave que tuvo este megaproyecto en la salud de las personas, erradicando enfermedades entéricas y digestivas como son el cólera y el tifus, los que se transmitían a través del consumo de verduras y hortalizas, cuyo riego provenía de las aguas servidas.

Tratamiento de las aguas

Parte del proyecto Mapocho Urbano Limpio, no sólo consideró dejar de descargar aguas servidas en el caudal, sino que además tratar más de 8.800 litros de agua por segundo las que luego de su tratamiento realizado en la Biofactoría del Gran Santiago se devuelven al Mapocho.

Las biofactorías son centros productores de recursos valiosos, que no generan residuos ni impacto al medio ambiente y no consumen energía de origen fósil porque producen su propia energía para funcionar. Un verdadero aporta a la salud planetaria, tal como las distinguió la COP24 realizada en 2018 en Polonia.

A esta forma de producir se le conoce como economía circular, ya que los residuos obtenidos de esas aguas obtienen nuevos usos, como energía, abono y biogás, impactando positivamente en el medioambiente.

La gerenta general de Aguas Andinas, Marta Colet, destacó el compromiso de la compañía de servicios medioambientales por ser un aporte para la ciudadanía, siempre respetando el medioambiente y la sustentabilidad.

“En Aguas Andinas estamos comprometidos con el desarrollo sostenible del país que nos permita, además, ser un aporte para la comunidad. Este trabajo, que ha sido de largo aliento, no solo cambió la cara a Santiago, sino que también calidad de vida a millones de santiaguinos a través de la descontaminación del principal caudal que atraviesa la capital”, sostuvo la gerenta.

Proyectos futuros

Existe una iniciativa llamada Mapocho 42K el que espera que se acondicione la ribera sur del río Mapocho como una gran ciclovía de uso público que será una continuidad paisajística que acompañe al torrente desde la plaza San Enrique en Lo Barnechea hasta Pudahuel.

En respuesta a ello, en marzo de este año, el Consejo Regional Metropolitano aprobó los recursos para el Diseño de Arquitectura y Especialidades del Proyecto “Paseo Urbano Fluvial Mapocho”, con una extensión de 4.3 km va entre el puente La Concepción en Providencia y el puente Padre Hurtado en el sector de Estación Mapocho.

Éste además considera 5 accesos con accesibilidad universal y un paseo pavimentado en el lecho del río, así como luminarias, cámaras de televigilancia y un sistema de alerta temprana, ante eventuales crecidas del cauce del Mapocho.

Otro proyecto que ya está en construcción es el Parque Mapocho Río entre las comunas de Quinta Normal y Cerro Navia. Esto es parte de los parques lineales que acompañan el recorrido del Mapocho los cuales están en Vitacura, Providencia, Santiago, y parte de Quinta Normal con el Parque de la Familia.

“El Proyecto Mapocho Río es, desde el punto de vista urbano, la intervención más ambiciosa como ministerio. A su vez, es bueno resaltar que este, y otros proyectos alrededor del río, han nacido de propuestas ciudadanas” declaró Guillermo Rolando, Subsecretario de Vivienda y Urbanismo.

Este parque que inició su construcción en junio de este año y dentro de sus 42 hectáreas de extensión inicial y 9 kilómetros de distancia, las principales atracciones serán una laguna para kayaks, zona de escalada, patinódromo, skateparks, anfiteatros, multicanchas y una playa con agua del río Mapocho.