Justicia decreta prisión preventiva para autor confeso de homicidio de menor en Coronel
La Fiscalía detalló que el inculpado amarró a Nicolás Paillán antes de enterrarlo, además de confirmar a través de la autopsia que lo apuñaló en al menos tres oportunidades.
El Juzgado de Garantía de Coronel ordenó la prisión preventiva para el autor confeso del homicidio del adolescente Nicolás Paillán, quien desapareció el pasado fin de semana en la discoteque La Carreta, tras lo cual su cuerpo fue encontrado días después.
El único involucrado hasta ahora es un hombre de 35 años en situación de calle e identificado como Francisco Maturana, quien reconoció que dio muerte al adolescente, por lo que fue formalizado por homicidio calificado.
Según consignó radio Cooperativa, la Fiscalía detalló que el inculpado amarró a Nicolás Paillán antes de enterrarlo, además de confirmar a través de la autopsia que lo apuñaló en al menos tres oportunidades.
En vista de la gravedad del delito, donde la Delegación Presidencial del Biobío y la Defensoría de la Niñez son querellantes, el acusado arriesga una pena que puede llegar a presidio perpetuo calificado.
El individuo confesó su participación en el homicidio, según declaró el fiscal Cristián Vega. “sí reconoció su participación en los hechos. No tengo todos los antecedentes a la vista todavía, pero, en principio, sería un delito de homicidio… No descartando una sustracción, pero no sería el modus principal”, expresó.
“La persona vivía al frente del local donde este joven había concurrido con su grupo familiar y en ese lugar se producen los hechos y se encuentra el cuerpo”, agregó.
Por su parte, el padre de Nicolás, Miguel Paillán, evidenció sus suspicacias respecto a que Maturana sea el único involucrado en la muerte de su hijo.
“Y si lo fuera, me interesaría saber mucho poder saber el motivo de por qué lo hizo, porque a mi hijo no tendrían por qué haberle quitado la vida de esa forma; una forma muy angustiante y dolorosa”, indicó.
Cabe destacar que tras el hallazgo del cuerpo de Nicolás Paillán, un grupo de jóvenes apedreó y quemó el lugar en donde se encontraron los restos del adolescente desaparecido.