Alerta de Meteorología: lluvia, viento de 70km/h, granizo, tormentas eléctricas y marejadas
El frente de mal tiempo comenzaría mañana miércoles y se extendería desde Huasco hasta Valdivia. Onemi está en alerta
La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) amplió detalles en horas recientes sobre el sistema frontal que arribará mañana al país con lluvias en Santiago y otras zonas
La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) amplió detalles en horas recientes sobre el sistema frontal que arribará mañana al país con lluvias en Santiago y otras zonas, granizo pero con ráfagas de viento de 70 km/h, granizo, tormentas eléctricas y marejadas en la zona central.
“Una condición de bloqueo en el océano produce que un sistema frontal se desplace hacia la zona centro, afectando desde el 21 de junio en la noche, inicialmente al sector sur de la Región Metropolitana con precipitaciones. Las que se extenderán posteriormente”, indicó el organismo.
El nuevo aviso indica también frente frío, y “probables tormentas eléctricas” que se presentarán en cinco regiones del país. Las probables tormentas eléctricas afectarán a las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins y Maule.
El evento comenzará la mañana de este miércoles 22 de junio y se extenderá hasta la madrugada del jueves 23.
Del mismo modo, la Gobernación Marítima de Valparaíso, informa que producto del sistema frontal “que se manifestará en las costas del país, se generará gran oleaje que se proyectará como marejadas anormales del noroeste entre Huasco e Isla Mocha
Este fenómeno se mantendrá hasta el jueves 23 de junio, cuya la condición más intensa se espera durante la noche del día miércoles 22 y la madrugada del jueves 23 de junio, sobre todo en los horarios de pleamar o de más alta marea, en especial entre las 17:00 y 19:00 hora local.
Según informó, la magnitud del fenómeno permite prever sobrepasos y potenciales daños a la infraestructura costera, principalmente en bahías abiertas hacia la dirección señalada.
En tanto ONEMI recomienda a la población suspender las actividades recreativas en la costa; no exponerse a rompientes ni oleaje, particularmente en sectores de roqueríos; y conducir con precaución por caminos en el borde costero, ya que podría haber obstáculos en la ruta, arrastre de arena, piedras, algas, entre otros.
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