Dólar abre por sobre los $1.000 pese a intervención verbal del Banco Central
La moneda estadounidense no cedió ante el pronunciamiento de la entidad y siguió con su descontrol en medio de una nueva caída del precio del cobre.
El dólar continuó durante este martes con su descontrol total, ya que abrió la jornada por sobre la barrera psicológica de los $1.000, haciendo caso omiso a la intervención verbal realizada ayer por el Banco Central.
A inicios del día, la moneda estadounidense alcanzó los $1.010,4, escalando rápidamente a los $1.024,2 cerca de las 09:00 horas.
Los temores frente a una recesión mundial fortalecieron a la divisa en todo el mundo. El dollar index, que mide el valor del billete verde frente a otras seis monedas internacionales, avanzó en 0,21%. Aquello provocó que el euro alcanzara la paridad con el dólar por primera vez en 20 años.
El otro factor trascendental en la volatilidad cambiaria es el precio del cobre, que durante esta jornada sufrió una nueva baja ante las inquietudes de los mercados globales frente a los nuevos confinamientos aplicados por China debido a los contagios con COVID-19.
De acuerdo al reporte de la Comisión Chilena del Cobre (Cochico), el metal rojo registró un fuerte retroceso diario de 3,31%, alcanzando los US$ 3,343 la libra (US$ 7.370,50 la tonelada).
El pronunciamiento del Banco Central
En medio de la polémica con las autoridades de Gobierno que exigían “análisis” o “medidas” de su parte, el Banco Central emitió una declaración en donde enumeró los factores que estarían detrás de la alza del dólar.
En el texto, que fue interpretado como una “intervención verbal” del ente emisor, señaló que “a nivel local, la política monetaria se ha venido ajustando desde hace un tiempo para hacer frente a la mayor inflación y al exceso de gasto observado el año anterior. Por su parte, la política fiscal, se enmarca en una senda de convergencia coherente con las condiciones de largo plazo de la economía. Sin embargo, el significativo déficit de la cuenta corriente, una inflación alta y los niveles de incertidumbre local, han aumentado la sensibilidad de la economía a shocks externos”.
“El Banco considera que los factores que han tensionado al mercado cambiario seguirán presentes, y continuará con el monitoreo de esta situación. De ser necesario, implementará las medidas que correspondan para asegurar el normal funcionamiento de los pagos internos y externos”, agregó.
Algunos expertos esperaban que este pronunciamiento tuviera algún efecto en el mercado cambiario, pero la presión internacional de la moneda estadounidense se terminó imponiendo.