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19 de Julio de 2022

Contratistas forestales contabilizan $158 mil millones en pérdidas por los atentados en el sur de Chile

Los afectados hacen un llamado a La Moneda para endurecer el estado de excepción e instalarlo en dos regiones donde aún no se ha decretado. 

Por L. Rivera
Los contratistas forestales exigen estado de excepción en Los Ríos y Los Lagos AGENCIA UNO/ARCHIVO
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Los últimos atentados incendiarios a maquinaria agrícola y forestal han despertado la alerta entre los funcionarios y trabajadores de las empresas afectadas por los siniestros. Si bien existe un estado de excepción acotado en las Regiones del Biobío y la Araucanía, en Los Ríos y Los Lagos los dirigentes han sacado la voz para que las Fuerzas Armadas sean enviadas a custodiar la zona. 

Desde la Corporación Chilena de la Madera (Corma) y desde la Asociación de Contratistas Forestales (Acoforag) han levantado la voz para que se hagan presentes las autoridades y busquen reducir el número de ataques.

“Lo que falta es una presencia y un seguimiento después a los hechos de violencia… Estos atentados se están moviendo hacia el sur”, es el discurso que han replicado en estos organismos durante los últimos días. 

En ambas entidades tienen un registro de los siniestros intencionales que han sufrido en prácticamente una década. A modo de ejemplo, los ataques a empresas forestales han subido en un 67% en Los Ríos y un 300% en Los Lagos. Pero no es lo único, según los datos a los que accedió EL DÍNAMO, las pérdidas en los últimos ocho años son multimillonarias. 

Desde 2014 a la fecha, la Acoforag contabiliza $158.513.000.000 como saldo en contra después de los hechos de violencia. En 2022 ya han sumado $24.084 millones, mientras que el año pasado, que fue récord entre los años en cuestión, el número alcanzó 41.422 millones.

El número de todos los atentados

De acuerdo a los números que manejan la Acoforag y la Corma desde 2014, el número de atentados ha ido creciendo con el tiempo en las cuatro regiones del sur de Chile. Esa primera temporada cerró con cinco ataques, mientras que en 2015 pasó a 14. 

En 2016 las cosas no fueron diferentes y los empresarios registraron 46. En 2017, los números fueron menores (14), pero en 2018 y 2019 volvieron a ser complicados con 39 siniestros intencionales. En 2020 se llegó a 80 y en 2021, año récord, se contabilizaron 89. 

Con los 59 atentados que se registran en este 2022, la suma total alcanza 385. 

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