Juez relata encerrona donde fue golpeado para robarle su automóvil y el celular
En un fin de semana con extrema violencia en las calles del Biobío, Carlos Hidalgo, quien imparte justicia en Concepción, sufrió un violento asalto en el sector La Greda de Penco.
No se está salvando nadie, ni los jueces del país. Las encerronas en las calles y carreteras del país se han tomado la agenda pública y dos de ellas, que generaron la muerte de los choferes en Santiago y Talcahuano, han movilizado al gobierno para la creación de un nuevo proyecto de ley.
Este fin de semana, en un violento hecho sucedido en la Región del Biobío, el juez de los tribunales de Concepción Carlos Hidalgo Muñoz se sumó a la lista de ciudadanos que han sido víctimas de robos de vehículo bajo este formato.
“Estoy bien. Las encerronas que vemos en la televisión son muy reales, estos señores aparecieron de todos lados, es gente muy joven y muy violenta, pues pese a decirles que les iba a entregar el auto me golpearon”, escribió Hidalgo en su cuenta de Facebook.
Un carabinero de civil que pasó por el lugar le prestó ayuda y lo ayudó a llegar hasta el Hospital Penco-Lirquén, donde recién pudo reunirse con familiares y amigos.
“Al pedir ayuda, algunos pasaron de largo, puede ser que al verme con sangre en la cara por el golpe que me dieron en la cabeza se asustaron”, fue otro de los textos que compartió el jurista en sus redes sociales para detallar lo ocurrido en el sector La Greda de Penco.
Hidalgo, quien perdió su vehículo marca BMW y su teléfono celular, por ahora se mantiene con tres días de licencia médica a la espera de las investigaciones que puedan dar algún indicio de los responsables del asalto.
Lo ocurrido con el juez penquista no fue la única encerrona registrada en esta zona del país. De hecho, se registró una segunda muerte después de lo conocido en la Costanera Norte de la Región Metropolitana. En Talcahuano, cuando se trasladaba con su esposa, un hombre de 68 años fue asesinado en el sector residencial de Lomas Coloradas cuando intentaron robar su automóvil.