Arma importada, pago de $2 millones y tiros por la espalda: así actuó el joven colombiano investigado por sicariato
El padre del menor de edad se negó a apoyarlo en la comisaría y se retiró.
Es uno de los últimos casos que ha impactado a la opinión pública. La detención de un niño de 14 años de nacionalidad colombiana como protagonista de un homicidio en La Florida abrió una investigación por parte de la Policía de Investigaciones (PDI).
El adolescente no tiene residencia aprobada en el país y, según las primeras diligencias, es el presunto autor de la muerte de de Daniel Alejandro Díaz Molina, un sujeto de 24 años que había sido detenido 14 veces por delitos de mayor connotación social (lo que incluye homicidio, lesiones, violación, robo con fuerza, infracción a la ley de drogas y robo con violencia).
De acuerdo a la investigación, el menor de edad, que tiene domicilio en Cerro Navia, usó un arma importada desde el extranjero para asesinar a Díaz el domingo, a eso de las 21:00 horas.
En principio habrían sido 10 balazos los que ejecutó, algunos de ellos por la espalda. “Da cuenta de un hecho alevoso. Cuando ya está en el suelo, el imputado lo remata disparándole de frente”, confirmó Luis Jaramillo de la Fiscalía Oriente.
El arma que eventualmente utilizó el joven colombiano no está alterada y es por eso que los policías trabajan en la hipótesis de un sicariato. De hecho, ha trascendido que se habría efectuado un pago de dos millones de pesos para el autor del crimen.
El padre no apoyó al menor de 14 años
Al momento de la detención, el padre del supuesto sicario, extranjero con cédula nacional, no quiso apoyarlo y se negó a declarar en la comisaría. Se fijaron 100 días para la investigación de esta causa y por ahora el implicado estará con internación provisoria en un centro del Sename.
“Estamos ante una posible investigación por sicariato: por la forma de ejecución, por el tipo de arma y porque un testigo declaró que el imputado mencionó un pago de dinero”, complementó el persecutor Jaramillo.
“Es lamentable. Da cuenta de algo que está pasando con el control en la primera línea, que es la familia”, dijo el general inspector Carlos González, jefe de la Zona Metropolitana, al momento de dar a conocer que 200 menores de edad son trasladados al día a las distintas comisarías del país por diversos motivos y delitos.
